Dudas y certezas para el Camp Nou

Lopetegui se agarra a las «cosas positivas» de su Madrid para jugarse la vida en el clásico: las ocasiones de gol, la mejoría de Benzema y la vuelta de Isco.

Asegura Lopetegui que todo el ruido que le rodea le resulta lejano, casi ajeno. El técnico se mantiene firme centrándose únicamente en su trabajo, en lo que él puede controlar. Trata de no escuchar ni leer nada mientras mantiene su discurso. Está convencido de que el Real Madrid sólo mereció realmente la derrota el día del Sevilla y que a sus chicos el fútbol les está regateando demasiado el premio al esfuerzo y al trabajo realizado. Aunque muchos le vean fuera después del clásico, él sólo piensa en salir, paso a paso, de una dinámica complicada. Para Julen, la victoria en Champions va a ser un punto de inflexión, porque supone volver a ganar después de cinco partidos sin hacerlo y romper una primera barrera. La segunda, según siempre el pensamiento del entrenador, sería volver a marcar con fluidez, y eso es lo que él cree que está por venir. Confía en su metodología y en el valor de una plantilla que se ha enredado de mala manera después de derrotar de forma brillante a la Roma.

OCASIONES DE GOL

Todo ha ido mal desde entonces en cuanto a resultados, puntería y sensaciones, pero Lopetegui insiste en quedarse con las cosas positivas, con los argumentos con los que va a llegar al Camp Nou para jugarse más que tres puntos.

Dentro de las dudas hay algunas certezas en la libreta del míster, aunque a día de hoy enumerarlas sea predicar en el desierto de la urgencia de la alta competición. El Real Madrid volvió a generar muchas ocasiones frente al Viktoria Plzen, suficientes como para dejar sentenciado el encuentro en la primera parte. Otra vez se encontraron con el palo y luego con algo de impaciencia en el remate. Pero las ocasiones están y a eso se agarra Lopetegui, a que los suyos han tirado mucho más a puerta que los últimos rivales que les han superado.

DESPIERTA BENZEMA

Un mes y veinte días llevaba el francés sin marcar cuando abrió el marcador ante los checos con un buen remate de cabeza. Después de un gran comienzo de curso, Karim se había quedado seco. El uno de septiembre le hizo un doblete al Leganés en el Bernabéu y encabezaba la tabla de goleadores de LaLiga junto a Messi. Desde entonces había desaparecido y la teoría de que sin Cristiano él daría un paso adelante en el área se desmoronaba. Ante el Levante apareció al final, remató al palo y dio otro aire al ataque blanco. El martes volvió a marcar y fue de lo mejor de un grupo al que le cuesta creer en sí mismo.

MARCELO, A TIEMPO

No pudo acabar el último partido por un golpe en el tobillo derecho. Hasta él se temió lo peor, pero parece que podrá estar en el Camp Nou. El brasileño ha anotado dos de los tres últimos tantos del Madrid y siempre ha sido un termómetro del momento de forma del equipo. Algún síntoma de mejoría suya siempre es bienvenido en el grupo y, sin Carvajal, es el único lateral capaz de atacar.

ISCO Y ASENSIO

Son los dos jugones de este Madrid, más importantes incluso sin Cristiano. El malagueño va, poco a poco, recuperando la forma después de su operación, aunque todavía no ha podido jugar 90 minutos seguidos tras un mes parado por la apendicitis. Su desborde y verticalidad son imprescindibles para el esquema de posesión de Lopetegui. La prueba es que en su ausencia, el Madrid no fue capaz de marcar un gol ni desbordar a los rivales. A Asensio también se le espera en el Camp Nou tras, quizá, sus peores semanas en cuanto a fútbol desde que viste de blanco. Ambos están a medio camino entre las certezas y las dudas con las que el Real Madrid viaja a Barcelona. «Un partido precioso y motivante» en palabras de Julen, convencido de que a los suyos ya les toca ganar y hacerlo con claridad en su camino hacia la recuperación.