Europeo sub'19: La generación de 2000 sigue ganando

El capitán es Abel Ruiz, pero la referencia de la selección sub’19 es Ferrán Torres. El jugador del Valencia es el que más experiencia tiene en el fútbol de élite, debutó ya en la Liga de Campeones el año pasado y su peso en el equipo es superior al del resto de sus compañeros. Por eso asumió la responsabilidad de lanzar el penalti decisivo contra Francia en las semifinales. Tiró el quinto y acertó para meter a España en una nueva final. Pero no era casualidad ninguna de las dos cosas. Contra Portugal en el partido decisivo volvió a asumir el mando con los dos goles que llevaron a España al título.

Portugal fue la única selección que se le resistió a España en la primera fase. Pero España ha ido cogiendo confianza con el paso de los partidos. La confianza de jugadores como Ferrán, pero también de los demás. De esa banda izquierda que forman Miranda y Bryan Gil por la que llegaron los dos goles españoles.

Se entienden perfectamente el lateral del Barcelona y el extremo del Sevilla. Cuando Miranda dobla, Bryan le abre hueco y le da balones. Cuando es Bryan el que avanza, el lateral le ofrece una salida por el medio. Fue Bryan el que puso el balón del primero después de un pase de Miranda para que Ferrán Torres rematara el primero de volea. En el segundo, el pase fue de Miranda y el remate, del «7» de España otra vez.

España dominó el juego, muy segura de sí misma, con el mando de Blanco y Moha en el medio y con la calidad de Sergio Gómez y su zurda. El desborde era cosa de los extremos. Y el remate, también, porque Abel Ruiz estaba muy vigilado. Aunque pudo marcar el capitán en un rebote al pegarle en el cuerpo un despeje del portero portugués. La ocasión más clara para el «9» español llegó en la segunda parte cuando no acertó con la portería después de un pase atrás de Torres.

El nerviosismo del guardameta rival se fue contagiando al resto de sus compañeros. Nerviosos y frustrados por la derrota, terminaron dando patadas innecesarias, como la que se llevó Arnau Tenas de Loureiro, o intentando acelerar la salida del campo de Bryan Gil, que mucha prisa tampoco parecía tener.

Tenas, el portero español, fue fundamental para enfriar los ánimos de remontada del equipo portugués en un disparo con muy mala intención que despejó seguro con una mano por abajo. El guardameta había sido tan decisivo como Ferrán Torres en la tanda de penaltis de las semifinales contra Francia.

La selección no dudaba de su triunfo. Esta misma generación, la última nacida en el siglo XX, la del año 2000, ha sido ya campeona de Europa y subcampeona del mundo sub’17. Siguen los pasos de los mayores, de esa selección sub’21 que a finales del mes pasado se proclamó campeona de Europa de su categoría. Ferrán Torres ya está en la élite, Bryan Gil y Barrenetxea se acercan. Muchos más llegarán ahora.