Alonso, en la «pole»

En cuatro días los motores de la F-1 rugirán en Australia para comenzar una temporada que se presenta todavía más igualada que la anterior. Los expertos coinciden en las escasas diferencias que han mostrado los monoplazas de los favoritos: Red Bull, Ferrari, Lotus, McLaren y Mercedes. Y con estos condicionantes, pilotos como Lewis Hamilton no dudan en afirmar que Fernando Alonso es el piloto al que personalmente le gustaría batir al margen de que considere que es el favorito a conquistar el título por su velocidad y, sobre todo, por su experiencia.

La progresión de Ferrari y del F-138 es la que más ha sorprendido en el «paddock». Se han corregido las carencias de su antecesor y con un coche competitivo –no necesariamente el mejor–, Alonso se convierte en un durísimo rival. Él considera que con un coche dos décimas más lento que el de sus contrincantes está en condiciones de ganar las carreras.

Alonso está muy confiado en el nuevo coche y estima que la diferencia con el de Red Bull es muy pequeña y que puede hacerle frente. Para Stéfano Domenicalli, jefe de la escudería, subir al podio es el objetivo real del equipo para el primer gran premio de la temporada. En la «Scudería» son más que optimistas y están a la espera de la llegada de la gran evolución del monoplaza, que aterrizará en la tercera cita del calendario en China. En Ferrari parece que se han superado las diferencias que había entre los datos del túnel de viento y la información recogida en pista.

La pasada semana realizaron un test aerodinámico en la pista tarraconense de Idiada, que posee una larga recta, como si fuera un aeropuerto, y en la que equipos como McLaren o Williams prueban que la información virtual se corresponda con la física.

La temporada arranca en breve, aunque hay temor en los distintos equipos debido a que el reglamento técnico de 2014 cambia tanto que nadie va a invertir dinero y tiempo en desarrollar al extremo el coche de este año. De eso mismo ha avisado Alonso, que en 2011 vivió una situación similar cuando la distancia con Vettel parecía insalvable casi en el ecuador del año. La guerra psicológica ha empezado ya y el propio campeón del mundo, ante la competitividad de Ferrari, ha señalado que para él Mercedes puede convertirse en el rival más peligroso con sus pilotos Lewis Hamilton y Nico Rosberg. Ahora sólo queda confirmar los progresos realizados en pista. Cuenta atrás para Melbourne.

Pilotos de pago

La polémica sobre los pilotos que pagan por correr en la Fórmula Uno continúa. Casi el 40 por ciento de los pilotos que competirán este año han debido aportar alguna cantidad económica en forma de patrocinador a su escudería, lo que provoca que no siempre los mejores estén en la categoría reina debido a estas particulares pujas. El problema es que incluso equipos «grandes» como Williams aceptan esta modalidad.