Escuderías
La FIA reacciona
La Federación impone a los equipos unas presiones mínimas y máximas en los neumáticos para evitar que se repitan los reventones de Silverstone
El huracán desatado el pasado fin de semana con la crisis de los neumáticos (en Silverstone estallaron hasta en cinco monoplazas) ha provocado que el propio suministrador –Pirelli–, la FIA y la asociación de pilotos, GPDA (más vale tarde que nunca) hayan reaccionado con cambios sustanciales en los compuestos, que la Federación se ponga más seria con los equipos y que los pilotos plantearan un atisbo de boicot si no se garantizaba la seguridad.
Tras varios días de reflexión, todas las partes han hablado y las responsabilidades se reparten. Por un lado, Pirelli no tuvo la previsión necesaria y sus gomas no eran lo suficientemente consistentes en un escenario tan duro como Silverstone; por otro, los equipos no respetaron las presiones y los ángulos de caída (en los F-1, las ruedas no pisan «recto» ya que sufren mucha deformación a alta velocidad que hay que compensar) que recomienda el suministrador, y en algunos casos incluso se colocaban neumáticos en el lado contrario al que correspondía para compensar el desgaste sufrido por las ruedas en la clasificación (en función del número de curvas a derecha o izquierda y la velocidad a la que se pasa por cada viraje, la degradación es mayor); y, por último, la FIA, que dejó vía libre a las escuderías para configurar sus coches sobrepasando los límites permitidos tal y como se demostró en la última carrera con tantos reventones.
Desde este fin de semana, la FIA ha impuesto unas presiones mínimas y máximas así como unos grados de convergencia (colocación del neumático) determinados, siempre siguiendo los consejos de Pirelli. Además, la construcción del neumático trasero vuelve a ser de kevlar en lugar de acero como hasta ahora.
Esto puede suponer ciertos cambios en el rendimiento de los monoplazas y ahora se especula con que estas medidas de control pueden perjudicar ligeramente a equipos como Red Bull y Mercedes, que llevaban muy al límite (incluso fuera de él), las recomendaciones de Pirelli en cada pista para obtener más rendimiento. Ya el pasado año, en el GP de Bélgica, algunos equipos protestaron a la FIA ante la sospecha de que Red Bull llevaba demasiado lejos las indicaciones del suministrador de neumáticos.
Este fin de semana se disputa el Gran Premio de Alemania en Nurburgring, un trazado donde las ruedas no sufren tanto como lo hacían en Silverstone, aunque para asegurar que no haya problemas, Pirelli ha optado por los compuestos medio y blando, los mismos que en 2011.
Massa no renovará
El brasileño tiene pie y medio fuera de Ferrari. La falta de rendimiento en los dos últimos años y la irregularidad en éste, con varias salidas de pista, han obligado a Ferrari a buscar un recambio a pesar de las presiones del representante del piloto, Nicolas Todt, hijo del presidente de la FIA. Rosberg y Di Resta, en la lista de sustitutos.
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