Coche eléctrico
Fracasa la política del Gobierno para elevar los puntos de recarga
Solo hay 40.000 puntos, uno de cada cinco no funciona y la gran mayoría tienen una potencia insuficiente
La electrificación de automóviles en España va a paso de tortuga, según las últimas cifras disponibles. La red de puntos de recarga solo ha crecido un 6,1% en los últimos tres meses, hasta contabilizar 48.209 postes donde poder rellenar las baterías de los coches eléctricos. Pero de esta cantidad, el 21%, es decir, uno de cada cinco, concretamente 10.333, no están operativos y no funcionan por diferentes motivos, pero principalmente por problemas burocráticos. En total, se pueden utilizar únicamente 37.876 y la mayoría de ellos son de baja potencia. Una situación que está lastrando el desarrollo de la electromovilidad en España y, en este aspecto, nos encontramos entre los países más retrasados de la Europa comunitaria. Concretamente, estamos en la tercera posición por la cola y solo vamos por delante de la República Checa y Hungría.
La consecuencia de esta situación es que en general los compradores de automóviles nuevos rechazan las motorizaciones totalmente eléctricas, que solo representan menos del 5% de las nuevas matriculaciones. Hasta septiembre se han vendido 80.232 turismos electrificados, solo un 29% del objetivo anual fijado en 280.000 unidades. Por lo que respecta a los cargadores, la cifra de postes operativos está lejos del objetivo de 63.500 puntos de recarga para finales de año establecido por la UE. Por ello, los constructores de automóviles reclaman al Gobierno un plan de choque para que, en los próximos tres meses, se pueda además agilizar la señalización de la ubicación de los cargadores en las carreteras.
Según los datos de la asociación de fabricantes Anfac, solo ha aumentado una décima el indicador global de electromovilidad. Un índice que valora la penetración de los vehículos electrificados y la instalación de infraestructuras de recarga de acceso público. Nos encontramos ahora en 15,3 puntos sobre 100, es decir, aproximadamente la mitad de la media de la UE, a pesar de que el indicador europeo ha caído 5 décimas hasta los 28,6 puntos debido principalmente al estancamiento de las ventas de electrificados en el mercado de Alemania.
Por lo que se refiere a las ventas de vehículos electrificados, durante el pasado trimestre las matriculaciones se han mantenido a la baja, a excepción de septiembre. Al finalizar el tercer trimestre se habían vendido un total de 80.232 turismos electrificados, lo que supone menos del 30% del cumplimiento del objetivo anual establecido en 280.000. Esto evidencia que España está muy lejos de satisfacer los objetivos necesarios para cumplir el programa europeo «Fit for 55». En cuanto a la comparativa europea, España mantiene su posición por la cola, por delante únicamente de Hungría, Italia y Chequia. Destaca el fuerte retroceso que se ha registrado Alemania, con una disminución de 5,6 puntos, debido a la eliminación de los estímulos a la compra de vehículos eléctricos a finales del año pasado. Francia mantiene una evolución positiva respecto al año anterior y crecen especialmente Portugal y Gran Bretaña.
Otro aspecto crucial es que solo el 29% de la infraestructura de recarga de acceso público tiene una potencia superior a 22 kW. Según los objetivos estimados por Anfac, el 51% de los puntos de recarga debería contar con potencias superiores a los 22 kW en 2024. Por tanto, en el 71% de los puntos de recarga con los que cuenta España, el tiempo para la recarga es de entre 3 y 19 horas. La red de carga ultrarrápida superior o igual a 150 kW solo cuenta con 2.705 puntos, lo que representa solo el 7,1% del total de puntos de carga operativos.
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