Gameiro completa el puzle de Simeone

El Atlético remata su ataque con la llegada del delantero francés. «Nueve hay uno sólo», advierte Fernando Torres

Kevin Gameiro (9-5-1987, Senlis –Francia–) completa el ataque para la próxima temporada del Atlético de Simeone. El ex delantero del Sevilla ha firmado por cuatro temporadas y el club rojiblanco ha abonado 32 millones al cuadro hispalense más cuatro en variables. Con su fichaje, el técnico argentino contará arriba con Antoine Griezmann, Fernando Torres, Ángel Correa y Kevin Gameiro, autores de 81 goles la pasada campaña. La capacidad anotadora y de trabajo de Gameiro son innegables. En su último ejercicio en las filas del Sevilla marcó 29 tantos en 52 encuentros oficiales y fue campeón de la Liga Europa.

El Atlético llevaba buscando delantero todo el verano. Costa (Chelsea), Cavani (PSG), Higuaín (Nápoles)... Las sucesivas negativas dieron opción a Gameiro, que antes del Sevilla jugó en el Lorient, el Estrasburgo y el PSG. En 2013 llegó al Pizjuán y se convirtió en una de las referencia en el equipo de Unai Emery. La gran ventaja de hacerse con los servicios de Gameiro no estriba tanto en su acreditaba eficacia goleadora como en su capacidad de encaje en un grupo: durante dos años, pese a que superaba por mucho la ratio goles/minutos de Bacca, aceptó sin una mala cara su contumaz suplencia en el Sevilla. Veloz y abnegado, Gameiro encaja como un guante en el estilo del Cholo.

Descartada la opción principal de Diego Costa el director deportivo del Atlético, José Luis Pérez Caminero, calificó la llegada del delantero francés como la pieza que encajaba «perfectamente» en lo que buscaban. «Es un delantero acostumbrado a presionar la salida de balón del rival e incansable en el esfuerzo, por lo que encaja perfectamente en lo que buscábamos para reforzar nuestro ataque. Es un refuerzo que nos permitirá incrementar la competencia en la parte ofensiva del grupo. Se trata de un jugador muy rápido, con gran remate y que lleva varios años compitiendo en la Liga española, por lo que su adaptación será más sencilla», aseguró Caminero en la web del club, que se encuentra en plena gira por Australia y ya ha ganado su primer partido de pretemporada.

Por si el francés no tenía muy claro a dónde y para qué llega al Atlético, Fernando Torres se encargó de recordárselo desde Melbourne. «Nueve hay uno sólo, eso pone en la camiseta. El club está buscando un delantero más que venga a ayudar. Entiendo que venga un jugador y el que venga que se prepare para llegar a un equipo muy competitivo, para trabajar duro y competir por un puesto. El objetivo de todos los que estamos aquí es jugar lo máximo posible». El capitán y emblema rojiblanco es optimista para la nueva campaña: «El equipo va a crecer mucho por todo lo que sucedió el año pasado y lo que lleva haciendo los últimos años, manteniendo el nivel y la constancia, que es lo más complicado en el fútbol. Llevamos años jugando muchas finales y estando con los mejores, ya se puede decir que es una realidad, sólo se puede crecer, tenemos que mirar hacia arriba».

Gameiro es el cuarto fichaje rojiblanco tras la llegada del centrocampista argentino Nicolás Gaitán (Benfica), el extremo portugués Diogo Jota (Paços de Ferreira) y el lateral croata Sime Vrsaljko (Sassuolo).

Vietto, a olvidar en el Sevilla su año en el Atlético

Luciano Vietto buscará en el Sevilla la continuidad que no ha tenido en el conjunto rojiblanco, tras un primer año difícil, en el que las lesiones y la competencia no le han permitido brillar. El delantero argentino de 22 años, después de deslumbrar en su primera campaña en la Liga con el Villarreal, tuvo una temporada de altibajos como rojiblanco, en la que se quedó fuera del equipo durante un mes por una apendicitis y sufrió con la alta competitividad de la delantera del Atlético. Tres goles y cinco asistencias en 28 encuentros, 18 de ellos de titular, resumen un ejercicio que concluyó con su descarte en la pasada final de la Liga de Campeones. Una temporada en la que estuvo muy alejado de los 20 tantos que marcó con el Villarreal.