La FIFA pagó para que Irlanda no denunciara la «mano de Henry» en Suráfrica

El portero de Irlanda salió como un loco de la portería hacia el árbitro, igual que el resto de los compañeros. Francia había ganado (0-1) la ida de la eliminatoria de repesca para el Mundial de Suráfrica de 2010. En la vuelta, Irlanda igualó con un gol. Se llegó a la prórroga. Francia sacó una falta, en el segundo palo, Henry tocó la pelota y se la pasó a un compañero, a Gallas, para que marcase, Fue una jugada muy rápida, pero los irlandeses protestaban como locos, algo extraño había pasado ahí.

Había sido mano. Mano muy clara. «Nosotros sentíamos que teníamos una base legal contra la FIFA por la forma en la que habíamos fracasado en la fase previa de la Copa del Mundo por la mano de Henry», explicó ayer John Delaney, presidente de la Federación de fútbol irlandesa (FAI). Estaban muy enfadados, se sentían estafados, injustamente eliminados. Hasta Henry, tiempo después, reconoció que le había dado con la mano. El hecho era innegable y los irlandeses estaban dispuestos a llegar hasta el final. Es decir, recurrir a la justicia deportiva, quien sabe si a la ordinaria.

Y entonces apareció la FIFA. «Eso era un jueves, y el lunes el acuerdo estaba firmado y cerrado. Es un buen acuerdo para la FAI y un trato muy legítimo», continuó contando ayer. El máximo organismo del fútbol le dio 5 millones de euros para que se calmase y el asunto no fuese a más. «Era un pago a la asociación por no proceder mediante una causa legal. Había una cláusula de confidencialidad por la que no podía ni puedo hablar de la cantidad», dijo Delaney. Fueron cinco millones, porque todo tenía un precio para la FIFA.