La Audiencia aboca al Elche a Segunda

Considera que no concurren «situaciones irreversibles», ya que el descenso no implica la desaparición de los clubes e impera que el Elche «no atendió a las deudas con Hacienda en periodo voluntario y desatendió varios requerimientos».

La Audiencia Nacional ha avalado la decisión del Tribunal Administrativo del Deporte (TAD) y de la Liga de Fútbol Profesional (LFP) de descender a Segunda División al Elche Club de Fútbol por sus impagos a Hacienda. El Juzgado Central Contencioso Administrativo número 9 de este tribunal acordó ayer levantar la suspensión cautelar de esa resolución –una medida adoptada por la propia Audiencia Nacional el pasado día 16 tras el recurso planteado por el club ilicitano tres días antes para intentar impedir el descenso de categoría. La resolución judicial significa que la SD Eibar, que ocupó una de las plazas de descenso, se mantendrá en la máxima categoría del fútbol español en detrimento del Elche.

La titular del juzgado, Eva María Alfageme, rechaza uno tras otro todos los argumentos esgrimidos por el Elche para dejar en suspenso la decisión de la Liga y del Tribunal del Deporte; entre otros, que ya ha saldado sus deudas con Hacienda. Pero la magistrada recuerda al club ilicitano que las mismas «no se abonaron en periodo voluntario» y que, sólo tras varios requerimientos de la Agencia Tributaria, «cuando se le impuso la sanción de descenso de categoría se tomó la decisión de pagar, no antes». El incumplimiento de las reglas del juego, incluidas las obligaciones económicas, «desvirtúa y desnaturaliza la competición» y la paridad entre los clubes participantes, recalca. Es decir, aclara, si un equipo incumple sus obligaciones con la Agencia Tributaria sitúa al resto «en desventaja».

Del mismo modo, la Audiencia Nacional tampoco atiende las quejas del Elche respecto a que su descenso le generaría unas pérdidas de 80 millones de euros y le abocaría, incluso, a su desaparición. Para la magistrada, aunque es evidente que la pérdida de la categoría «entraña pérdidas económicas», resulta cuestionable que la medida acarree para el club las pérdidas que se apuntan. Y en todo caso, añade, esa merma de ingresos sería «reparable». Y tacha de «más que dudoso» que el club vaya a desaparecer si baja a Segunda, pues como sociedad anónima el Elche «tiene herramientas para ampliar su capacidad económica». Incluso en el supuesto de que no pudiera hacer frente a sus obligaciones económicas, recuerda, «la Ley Concursal prevé remedios» para evitar «situaciones dramáticas e irreversibles».

La renuencia del club a pagar a Hacienda hasta que fue sancionado con el descenso lleva a la Audiencia a rechazar el carácter «injusto» de la medida adoptada por la LFP, y ratificada por el TAD, pues «resulta básico» el «cumplimiento de las reglas establecidas» en la competición.

De mantener en suspenso el descenso, sostiene el tribunal, se vería afectado tanto el interés general como el del Eibar y el del resto de clubes y el propio «mapa de clasificaciones».

Por último, la magistrada despacha con una frase contundente la queja del Elche de que otros clubes tienen deudas con Hacienda y mantienen la categoría. «No es admisible pretender la igualdad en la ilegalidad», afirma tras precisar que a la LFP «no le consta» esa circunstancia.