RM Castilla

La sonrisa del goleador

PERFIL. Javier Hernández. Delantero del Real Madrid

La Razón
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Javier Hernández (Guadalajara, 1 de Junio de 1988) continúa la dinastía futbolística de su familia. Su abuelo, Tomás Balcázar, jugó el Mundial de Suiza 1954 y su padre, también llamado Javier Hernández, fue seleccionado por México para la cita mundialista en 1986, aunque no llegó a disputar un solo minuto. Precisamente de su progenitor le llegó el conocido sobrenombre de Chicharito, ya que a su padre le llamaban Chícharo cuando era futbolista por sus ojos verdes y pequeña estatura. El nuevo delantero del Real Madrid ha tenido que trabajar y pelear en cada entrenamiento para llegar hasta aquí, demostrando que se merecía una oportunidad. Su historia no es la del «niño maravilla» que despuntó en las categorías inferiores y fue la debilidad de los entrenadores, sino todo lo contrario. Nadie le ha regalado nada y a base de esfuerzo ha escrito su destino. Formado en Chivas de Guadalajara, vivió la decepción de quedarse fuera del Mundial Sub'17 de 2005, siendo el realista Carlos Vela el elegido en su lugar. Su efímera irrupción en la primera división mexicana llegó en 2006 y tardó apenas un minuto en anotar su primer gol. Sin embargo, no fue suficiente para consolidarse en el once titular.

Durante 2007 y 2008 sus participaciones en el primer equipo de Chivas fueron contadas y Chicharito veía cómo el sueño de ser futbolista de élite comenzaba a evaporarse. Tenía 20 años, las oportunidades no llegaban y el mexicano pensó en dejar el fútbol para estudiar una carrera universitaria.

Los consejos y el apoyo de Ramón Morales, capitán de Chivas en ese momento, y una temporada 2010 fulgurante, en la que Javier Hernández se convierte en el máximo goleador del conjunto de Guadalajara, hicieron que los grandes clubes europeos volviesen su mirada sobre ese delantero oportunista y goleador que comenzaba a despuntar en su país. Finalmente, el Manchester United pujó fuerte (7'5 millones de euros) y lo firmó por cinco temporadas.

«Chicharito» Hernández contó con el beneplácito de Ferguson a su llegada y no era raro verlo en los onces titulares de los «diablos rojos» pero, a pesar de corresponder con goles en cada oportunidad que le otorgaban, poco a poco fue perdiendo protagonismo hasta casi ocupar un lugar testimonial en la plantilla del United con la contratación de David Moyes como técnico la temporada pasada.

El ariete mexicano no es el delantero más rápido del mundo, ni siquiera el más fuerte, pero sí uno de los más inteligentes dentro del área. A pesar de su 1'75 de estatura es un gran rematador de cabeza, ganándole en el salto a los centrales más poderosos de la Premier. Como titular o como revulsivo en las segundas partes, Chicharito tiene la capacidad de cambiar el devenir de un partido con un desmarque a la espalda de la defensa rival o un toque sutil dentro del área que acaba convirtiendo en gol.

La actitud positiva, siempre sonriendo, y el tesón para ir en busca de cualquier balón suelto hacen de Chicharito un jugador valioso para cualquier equipo del mundo. No tendrá la técnica que atesora Benzema, pero sí posee el don de aquellos delanteros que fabrican goles rematando con cualquier parte de su cuerpo. Maneja bien ambas piernas y siempre parece estar en el lugar adecuado dentro del área rival.

Es imposible vencer a alguien que nunca se rinde y Chicharito es de esos futbolistas. Movilidad constante, sacrificio y potencia en espacios cortos para combinar con sus acompañantes en ataque. El esquema del Madrid favorece sus cualidades gracias a Cristiano y Bale, dos extremos cuyos centros por ambas bandas sabrá aprovechar a la perfección el ariete mexicano.