Messi, «madridista» por un día

El delantero del Barça se entrenó en Valdebebas con la selección argentina, aunque su presencia en el amistoso de mañana contra España sigue siendo dudosa.

Se hizo esperar, pero Leo Messi pisó por fin el césped de Valdebebas. Era la imagen que se esperó durante toda la semana, el astro del Barça trabajando en las instalaciones del eterno rival. No pudo ser el sábado, pero ayer sí abandonó el hotel de concentración para ejercitarse como uno más en uno de los campos aledaños al estadio Alfredo Di Stéfano. El «10» de Argentina se hacía visible en territorio enemigo.

El jugador del Barcelona no jugó el viernes en la victoria de su selección contra Italia y puede que tampoco lo haga el martes en el Metropolitano contra España. La única preocupación de Sampaoli, el seleccionador argentino, es que el «10» llegue sano y descansado al Mundial y no quiere sobrecargarlo con partidos innecesarios. Le gustaría que el Barcelona también lo dosificara y no llegara muy castigado al Mundial de Rusia. Todas las opciones de la albiceleste pasan por él y el seleccionador argentino lo sabe. La estrategia es «Messi y diez más».

El reto del Mundial

Para que a Messi lo quieran como a Maradona en Argentina tendrían que pasar muchas cosas, pero la principal es que gane un Mundial. Ha ganado un oro olímpico, pero eso no alcanza porque ha perdido las tres finales absolutas que ha disputado, dos de la Copa América y la del pasado Mundial.

Ser campeón en Rusia es el gran reto de Leo y de Argentina. Y Sampaoli es consciente de que es fundamental que la estrella esté a gusto. Por eso asumía hace unos días que el equipo no es suyo: «Es el equipo de Messi».

El casting

Argentina y España utilizarán el amistoso de mañana para medir su situación real frente a otros aspirantes a ganar el Mundial. La Roja dio muestras de estar en condiciones de todo el pasado viernes contra Alemania. Lopetegui utilizará el encuentro para definir la lista y comprobar si alguno de los nuevos pueden ganarse un sitio. Rodri ya tuvo unos minutos en Düsseldorf y se convirtió en el décimo jugador que debuta con Lopetegui al mando de la Roja.

Lo previsible es que Marcos Alonso y Parejo también tengan su oportunidad contra Argentina. La España de Lopetegui es un equipo hecho y quedan pocas plazas para asignar camino de Rusia.

Cambio de rol

Contra Alemania, Isco fue protagonista. Sus combinaciones con Iniesta dieron a España los mejores minutos, dominio que sólo se transformó en un gol, pero que anima a pensar en cosas buenas para el equipo de Lopetegui. El malagueño ha perdido protagonismo en el Madrid, al tiempo que lo han ganado Lucas Vázquez y Marco Asensio. Los dos fueron suplentes en Düsseldorf, aunque mañana pueden invertirse los papeles. La ausencia de Silva, que dejó la concentración el sábado por motivos personales, puede dar más presencia a Asensio. El balear es habitual con Lopetegui y su lugar en el Mundial parece seguro. La situación de Lucas es diferente. Ha regresado a una convocatoria después de quince meses y pelea por ganarse la confianza del seleccionador.

La España de siempre

«Esta selección ilusiona», dice Saúl. «Desde que llegó Lopetegui hemos hecho una fase de clasificación muy buena. El equipo estuvo bien, pero tenemos margen de mejora y tiempo para prepararnos», asegura el centrocampista del Atlético.

El amistoso en Alemania ha reforzado la confianza del equipo español, que fue superior durante la primera parte a la actual campeona del mundo y de la Copa Confederaciones. Pero hay que seguir trabajando. «No vale la pena mirar si somos favoritos o no, sino trabajar, conocer nuestras virtudes, trabajarlas y llegar de la mejor forma al Mundial», afirma Lucas Vázquez.