Málaga
Spahic da aire al Sevilla (1-0)
El Sevilla ha sumado tres puntos vitales ante Osasuna (1-0) en el duelo disputado este sábado en el Sánchez Pizjuán correspondiente a la decimoctava jornada de la Liga BBVA, donde los de Míchel sufrieron para comenzar el 2013 con buen pie y romper así una racha de cinco partidos sin ganar gracias al solitario tanto de Spahic en el 83, mientras que los de Mendilibar se ven abocados al 'farolillo rojo'.
El conjunto andaluz fue de menos a más en un duelo en el que su técnico Míchel podía tener una de sus últimas bazas para remontar el vuelo del equipo. Sin brillar y con algo de sufrimiento, el Sevilla pudo lograr una victoria vital para sumar puntos en Liga que le acerquen a los puestos europeos. Por su parte, Osasuna, que mostró un buen nivel aunque pecó de conformista, comienza el 2013 como colista por la victoria del Deportivo ante el Málaga.
La sensación de un nuevo Sevilla aprovechando el parón navideño y el inicio del 2013 fue un espejismo. Los de Míchel saltaron con ganas al césped del Pizjuán, olvidando su mala situación liguera, con buen criterio y encontrando con aparente facilidad los acercamientos al área rival de la mano de Reyes y Navas. Sin embargo, aquello fue una pequeña ilusión de los locales.
Osasuna pronto tomó posiciones en defensa y dificultó la circulación de los andaluces, que se quedaron sin ideas y sin acercamientos a la portería de Andrés Fernández hasta casi el descanso. A base de colgar balones con peligro, los de Mendilibar encerraron al Sevilla en su campo durante gran parte de la primera mitad.
Un mano a mano de Armenteros en el minuto 25 confirmó que el conjunto sevillista se encontraba en caída libre. Era Osasuna quien dominaba, aunque sin excesivo peligro, hasta que Negredo recuperó algo de protagonismo para el Sevilla con una gran ocasión tras un pase de Reyes que le dejó solo ante el portero visitante. Las señales de vida en el equipo de Míchel hicieron recular a los navarros pero, aunque el duelo quedó más equilibrado antes del descanso, el Sevilla adolecía de juego en el centro del campo.
Tras el paso por los vestuarios el partido comenzó trabado, pero pronto llegaron las ocasiones claras. Primero, el colegiado Del Cerro Grande anuló un jugadón de Kike Sola, que el delantero osasunista culminó en gol, por una mano inexistente. Después, el Sevilla tiró de estrategia en una falta botada por Reyes para rozar el primero de la noche.
De nuevo el partido entró en parada, pero de ella salió el Sevilla con intensidad y Osasuna optó por una versión más conformista firmando el empate. La bota de Reyes habilitó a Navas y después a Rakitic pero los de Míchel no lograron ver portería. Por su parte, la apuesta de los locales por irse arriba dejó a Osasuna la opción de alguna contra peligrosa.
La insistencia de los locales mereció el tanto que finalmente llegó gracias a Spahic en el minuto 83. Una jugada carambolesca en el área de Andrés Fernández, donde el guardameta sacó dos remates previos, terminó en el gol sevillista, que desató la euforia en los de Míchel. Osasuna había desaparecido hacía ya tiempo y no tuvo opción de reaccionar con lo que los tres puntos se quedaron en el Pizjuán.