Hípica

"Jappeloup" o cuando el tamaño no es lo importante

El legendario caballo francés tenía una alzada de 1,58 y se convirtió en campeón olímpico en Seúl superando todos los prejuicios

Pierre Durand y Jappeloup
Pierre Durand y JappeloupChacco Marketing

"Jappeloup" fue uno de los caballos más emblemáticos del siglo XX. El mítico equino francés se convirtió en uno de los mejores de la historia del Salto de Obstáculos.

Nació en 1975 fruto de un cruce poco habitual: "Tyrol II", un Trotón Francés, y "Venerable", una Purasangre. El caballo tenía una alzada de 1,58 metros con lo que su físico no encajaba en los estándares del Salto de la época y tampoco lo haría ahora. Se valoraba más la fuerza bruta que la agilidad, por lo que "Jappeloup" no estaba destinado siquiera a aspirar a la élite. Su criador, Henry Delage, tenía otra visión: apostó por un caballo que combinaba la explosividad del Purasangre con la potencia en los posteriores de los Trotones. El resultado fue un potro oscuro, nervioso y temperamental, pero con una energía y agilidad fuera de lo común.

En sus años de potro "Jappeloup" fue rechazado por varios jinetes. Entre ellos, un joven Pierre Durand, que ya había sido campeón de Europa juvenil, se negó siquiera a probarlo debido a su físico. El caballo llegó a manos de otro francés, François Terrier-Thuault. Durand, nada más verlo saltar, asumió el error cometido y se convirtió en su jinete en 1981. Con paciencia y trabajo forjaron un binomio histórico.

Con siete años, "Jappeloup" saltó el CSI de Madrid haciendo un doble recorrido sin faltas en la Copa de Naciones y pasando al desempate del Gran Premio. Un año después ganó el Campeonato de Francia y logró una plata por equipos en los Juegos del Mediterráneo. En los Juegos Olímpicos de Los Ángeles, una caída de Durand y la espantada del caballo supusieron la eliminación del equipo francés. La imagen del caballo a galope hacia las cuadras dio la vuelta al mundo y puso en duda su fiabilidad para la alta competición. Durand nunca dejó de creer en "Jappeloup".

Los resultados posteriores demostraron que tenía razón: en 1985 fueron terceros en la final de la Copa del Mundo. Un año después se proclamaron, de nuevo, campeones de Francia y en 1987 fueron campeones de Europa a título individual. En los Juegos Olímpicos de Seúl, Durand y "Jappeloup" ganaron el oro individual y el bronce por equipos.

Después del éxito olímpico fueron plata por equipos en el Campeonato de Europa de 1989, oro por equipos en el Campeonato del Mundo de 1990 y segundos en la final de la Copa del Mundo. En 1991, Pierre Durand decidió retirar a "Jappeloup" con una ceremonia a los pies de la Torre Eiffel. Un par de meses después el caballo falleció a los 16 años de un paro cardíaco.

Sin su afamado caballo, Durand se convirtió en presidente de la Federación Ecuestre Francesa de 2008 a 2014 y miembro de la Academia de Deportes Francesa. La rivalidad del binomio galo con "Milton" y John Whitaker se convirtió en legendaria.

En 2013, la historia de "Jappeloup" fue llevada al cine con la película "Jappeloup. De padre a hijo". La parte de la película relativa a los Juegos de Seúl se grabó en el estadio Chapín de Jerez y muchos jinetes españoles actuaron como figurantes. "Jappeloup" saltó los prejuicios, la lógica y la historia hasta convertirse en uno de los grandes mitos de la equitación mundial.