«Empieza un mundial nuevo»

De la euforia nada más cruzar la meta, a la tranquilidad y seguridad en la sala de Prensa pasó Lorenzo una vez alcanzado el liderato. Completó un fin de semana perfecto, tanto por ponerse al mando como por hacer sentir a los rivales que ahora él es el más fuerte. Recuerda que queda mucho, pero se sabe con la iniciativa antes de llegar a Silverstone, un circuito que le gusta. «Sabía en mi interior que era el momento de recortar más puntos que en Indianápolis. Sabía que era un día importante, y por eso sentía más presión. Por fortuna he podido subir mi ritmo y los rivales no fueron capaces de seguirme», admitía. Todas las conclusiones que sacó de la República Checa eran positivas, porque ahora el panorama se pone muy a su favor: «No es sólo reducir la desventaja con Valentino, es también aumentarla con Marc, que después de esta carrera, creo que se reducen sus posibilidades. Con Rossi empezamos un nuevo campeonato juntos, desde cero», explicaba. «Queda mucho», coinciden los dos, que tienen siete citas por delante de una guerra fría en la que está prohibido fallar.

Un cero sería prácticamente definitivo para cualquiera, el error más temido y que ninguno ha cometido. Valentino no se ha bajado del podio, mientras que Lorenzo sí lo ha hecho en cuatro ocasiones, pero a cambio ha ganado dos veces más. «Es increíble que estemos tan igualados después de luchar tanto. Siento que de aquí al final hay más circuitos que le favorecen a él», lanzaba Rossi, mientras Jorge apuntaba que los dos están muy equilibrados en cuanto a sus virtudes. No quieren mirar más allá del siguiente «partido» en Silverstone, en el que también tendrán algo que decir las dos Honda, que pueden convertirse en jueces involuntarios si se filtran entre las Yamaha y roban puntos a alguno de los dos.