Papel

Kent, el campeón anónimo

La Razón
La RazónLa Razón

El británico Danny Kent (Honda) consiguió su primer título mundial y lo hizo de una manera agónica, puesto que desde Japón dispuso de la posibilidad de ser matemáticamente campeón del mundo de Moto3 y no pudo conseguirlo hasta la última carrera. Un fin de semana después de Motegi, en Phillip Island, tuvo la segunda oportunidad, pero ahí se equivocó y el portugués Miguel Oliveira se convirtió en su amenaza. Kent falló en todas las ocasiones que tuvo de ser campeón anticipadamente, algo inusual en un piloto que hasta Alemania había encadenado una trayectoria brillante. En Valencia le bastó con ser noveno para que un británico sea campeón del mundo 38 años después.