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Nos enseñaste a ganar

La Razón
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Silencio. El barcelonismo se queda mudo. Se va un referente. Una voz que siempre había que escuchar. Palabra de gurú que hemos dejado de oír. Se marcha Johan, pero se quedan su filosofía, sus ideas y sus valores, que son inmortales.

Fue el hombre que cambió la mentalidad de un club. El futbolista que señaló el camino. El entrenador que revolucionó el fútbol. Su primer gran mérito fue convertir al Barcelona en una institución que creyera en la victoria. Ya lo decía Josep Carreras: «Nos enseñó a ganar». Con él llegó una Liga tras 14 años de sequía, la primera Copa de Europa en el 92 con el inolvidable gol de Ronald Koeman. Las cuatro Ligas consecutivas, dos de ellas con un final imposible de creer y el Madrid naufragando en Tenerife.

Cruyff se atrevió a ejercer de líder, obsesionado con llegar al éxito, y lo hizo con una apuesta decidida por el balón y el dominio del rival y el juego desde la posesión. Ésta es su gran herencia, las líneas maestras del fútbol actual del Barça. Su legado permanecerá porque Johan Cruyff es y será parte del escudo del conjunto azulgrana.

Aunque en los últimos años quisieran utilizarle como instrumento para dividir, siempre pensó en el bien de su club, el que le hizo grande y al que modernizó tanto desde el césped como luego sentado en el banquillo. Por eso renunció a ser presidente de honor cuando sintió que quizá no iba a poder ser libre del todo. Su carácter y su personalidad siempre mandaban por encima de cualquier otra cosa.

Transmitió la pasión por el fútbol a todos los futbolistas a los que dirigió, la mayoría de los cuales son hoy entrenadores de primer nivel. Y casi todos han añadido una gran parte de las enseñanzas del holandés a su metodología.

En definitiva, un genio moderno, puede que adelantado a su tiempo, que cambió la historia del Barcelona y que ahora deja huérfanos a sus seguidores.

Llora el barcelonismo y lo hace también todo el mundo del deporte al que tanto amaba. Ésta era la clave, creer en el deporte como una forma de entender la vida. Esto es lo que siempre hizo Cruyff.

«El Flaco» transformó el Barcelona para convertirlo en el club ganador que es hoy en día; cambió el fútbol, llevándolo a un nivel superior con su influyente estilo propio, y nos cambió a todos. Descansa en paz, Johan.