
Tenis
Ruud confiesa sus problemas mentales después de meterse en semifinales del Mutua Madrid Open
"Me sentía como si estuviera en una rueda de hámster; nunca llegaba a ninguna parte", asegura el noruego que derrotó por 6-3 y 7-5 a Medvedev. Se medirá en la penúltima ronda con Cerúndolo

El noruego Casper Ruud terminó con una mala racha ante el ruso Daniil Medvedev al que ganó por primera vez en su carrera, 6-3 y 7-5 en una hora y 40 minutos, para alcanzar las semifinales del Mutua Madrid Open después de haber dado un paso adelante mentalmente.
Ruud, que llegó a ser el número dos del mundo y ahora está fuera del "top 10", reconoció haberse puesto en manos de especialistas para salir de una espiral complicada a nivel mental. "Pero me sentía un poco como si estuviera corriendo en una rueda de hámster que nunca llegaba a ninguna parte. Y esta vida, y esta vida del tenis profesional, es como una rueda de hámster que nunca se detiene, en realidad, excepto por seis semanas en noviembre y diciembre, donde se detiene, por supuesto. Pero luego vuelves justo después de Año Nuevo, o incluso este año, que empezamos la temporada el 27 o 28 de diciembre. Así que, en cierto modo, estás sacrificando tiempo personal y familiar, lo cual a veces resulta más difícil que otras. Simplemente me sentí como si estuviera en una espiral sin fin y sin llegar a ninguna parte, o como si estuviera atrapado en ella y necesitara salir un poco para reflexionar sobre mi situación y cómo me sentía", relató el noruego.
"Supongo que he vuelto a la espiral, pero con una mejor mentalidad, se me permite tener dificultades mentales o días más difíciles, y el tenis no se trata sólo de golpear bien las pelotas o ser rápido en la cancha, sino que también es un juego muy, muy consciente", dijo Ruud.
"Este año no me he sentido muy bien mentalmente. Pero he buscado ayuda y me ha funcionado de maravilla, he reaccionado rápidamente y me he sentido mucho mejor; así que tener a alguien con quien hablar sobre ciertas cosas me ha ayudado mucho", reconoció el noruego que jugará en semifinales con el argentino Francisco Cerúndolo.
Ruud subrayó la intensidad que vive un jugador de tenis. "Es una vida difícil en muchos sentidos, con muchos días de viaje, y llega un punto en el que sentía que era demasiado. Pero realmente busqué ayuda y me ha funcionado, así que me alegra sentir más alegría y sentir que estoy en un mejor lugar. Siento que me despierto cada día con una sonrisa. Así que me alegra haber sido honesto conmigo mismo y haber sentido que necesitaba ayuda, y ha dado sus frutos rápidamente".
"En esto tienes que ser bastante honesto contigo mismo cuando algo no funciona y algo necesita cambiar para mejor; eso es siempre lo que buscas.Así que, incluso ahora, si juego bien o me siento bien, puedo aspirar a ser mentalmente aún mejor, más resistente o incluso mejor en ciertas situaciones. Siempre puedo intentar mejorar mi revés, mi saque o mi devolución, así que siempre hay margen de mejora", dijo el noruego.
Ruud acabó con el maleficio ante Daniil Medvedev con el que habia perdido en todos los partidos anteriores. "Perdí tres veces y perdí en todas las superficies excepto en tierra batida: pista dura cubierta, pista dura al aire libre y hierba. Así que, o sea, estaba pensando: "Por favor, no pierdas también en tierra batida, porque pierdes en todas las superficies contra él", dijo. "Intenté aprovechar las condiciones y la superficie a mi favor, y lo afronté como afronto cualquier partido, de verdad. Cada partido tiene su propia vida, habrá un ganador, y pensaba: "¿Por qué no puedo ser yo esta vez?".
"Siento que he estado jugando bastante bien y me siento bien. Ocho sets jugados y ocho sets ganados, así que no puedo pedir nada mejor, sinceramente. He estado ganando a buenos jugadores y, sí, estoy muy contento con el partido ante Medvedev. Creo que Daniil jugó bien y yo también, así que el nivel fue bastante alto. Nunca le había ganado antes, así que fue un placer ganarle".
"Simplemente intenté adaptar mi juego en tierra batida a su estilo, que es más plano y con golpes más planos. Así que pensaba que, con el tiempo, espero que mi juego en tierra batida o mis golpes liftados le compliquen las cosas", relató el jugador noruego que insistió, como otros, en la dureza del calendario del año.
"El calendario es así. Si terminas el año entre los 30 mejores del mundo y al año siguiente estás obligado a jugar, creo que conté 28 o 29 semanas del año siguiente en las que eres obligatorio estar presente, o de alguna manera te obligan a estar allí. Si contamos las dos semanas de Grand Slam, entonces tenemos ocho semanas de torneos obligatorios. Siete de los nueve Masters 1000 se están convirtiendo en torneos de dos semanas o, por supuesto, uno de una semana y media. Si multiplicas 7 por 2, son 14. Más 2, 16. Así que tienes 16, más 8, son 24. Y luego tenemos 5 torneos de 500 que también son obligatorios. Así que tenemos 29 semanas de torneos obligatorios a los que se supone que debes asistir. Y si no lo haces, los castigos son bastante severos", apuntó.
✕
Accede a tu cuenta para comentar