Un derbi desde otra perspectiva

Ancelotti no quiere perder el colchón de cuatro puntos al frente de la tabla pero llega además muy mermado. La defensa será de circunstancias pero la delantera será tan letal como siempre. En el Atlético no falta ninguna pieza clave.

Arrastraba el Atlético una maldición que cruzaba a través de los siglos, un destino cruel que le impedía ganar al Real Madrid. Y el castigo se agravaba con el recuerdo de la última vez, porque el último triunfo rojiblanco en los derbis coincidió con el año del descenso a Segunda. Hasta que el 17 de mayo de 2013, el Atlético se atrevió a ganar con todo en contra. En aquella final de Copa en el Bernabéu, el Atlético se liberó de todos sus complejos. Ganó el título y su primer derbi en 14 años y sus jugadores comprendieron que aquello no era tan complicado como parecía. Se trataba sólo de jugar. «Desde entonces hemos ganado, hemos perdido y hemos empatado», reflexiona Godín, pero aquel día encontramos la manera de ganar al Real Madrid».

«¿Cuál es esa manera?», le preguntaron ayer a Simeone. «La que ustedes ven», se limitó a contestar. Tiago, más explícito, daba unas cuantas claves días atrás en la web del club: «Intentaremos entrar fuerte, aprovechar la pelota parada y cada oportunidad que tengamos para hacerles daño». «Conocemos bien al rival y los últimos partidos nos han salido bien. No creo que el míster cambie mucho», añadía. «Jugaremos como siempre», concluye.

Y en ese «como siempre» se resume la estrategia del Cholo para enfrentarse al Madrid. Se trata de no dejar de hacer nada de lo que acostumbra a hacer el Atlético para ganar a cualquiera de los otros rivales a los que se enfrenta durante el año. Algo que al Atlético le costaba hacer en los años anteriores. Pero ahora ha cambiado el sentido de los clásicos. El Atlético no ha perdido ninguno de los cinco que se han disputado este año. Ha ganado tres y ha empatado dos. El Madrid todavía busca su primera victoria contra los rojiblancos.

El mejor síntoma del cambio de actitud del Atlético son los dos goles de Torres en el partido de vuelta de la Copa en el Bernabéu. No se había cumplido el primer minuto de cada tiempo y el Atlético ya había encajado un gol.

Ahora, el Atlético ha perdido el miedo y el balance, más allá de lo sucedido esta temporada es favorable a los rojiblancos desde que aquel gol de Miranda les dio la Copa en el Bernabéu. Cinco victorias, tres empates y tres derrotas es el resumen de los últimos once enfrentamientos. «Cuando llegué en 2010, el Atlético seguía sin ganar al Real Madrid, pero cuando llegaba el partido, se miraba con optimismo porque se podía ganar. En los últimos años ha cambiado la dinámica y el Atlético es capaz de competir con el Madrid y el Barcelona», dice Godín.

A ritmo de «reggaeton»

«Sé disciplinado», dice Cristiano Ronaldo en uno de sus quince consejos para estar en forma. Pocos futbolistas están tan atentos a su cuerpo, tan preocupados por su herramienta de trabajo. El portugués entendió enseguida que sólo el esfuerzo podía hacer de él el futbolista que está siendo. Cuenta Carlos Queiroz que una tarde en Mánchester, cuando era ayudante de Ferguson, estaba en su despacho y creía que se encontraba solo en la ciudad deportiva. Pero oyó que alguien daba balonazos en el campo de entrenamiento. Era Ronaldo, claro.

Ahora, acaba de cumplir 30 años y esta noche celebra una espectacular fiesta. Él sabe que tiene que apurar porque probablemente ya tiene más pasado que futuro como futbolista. Cuando le presentaron a Odegaard, le dijo que llegaría un momento en el que dejaría meter goles y tendría que meterlos él. Sabe que su ocaso está por llegar y trabaja para retrasarlo lo más posible. La temporada pasada hizo un esfuerzo que luego ha estado pagando y ésta, al principio, decidió tomárselo con más calma y descansó: luego en enero, no empezó el derbi de Copa en el Calderón y los dos partidos de sanción le han dado un pequeño descanso en un momento en el que él mismo reconocía que no estaba en su mejor momento. Hoy se acaba el paréntesis sin jugar, que no sin entrenarse. En el club niegan que Ronaldo sea un obseso de los entrenamientos, pero sí que se cuida de manera muy profesional. Él dice que hay que aprovechar cualquier momento y seguir una rutina y que se hace mejor con música: «Me gusta el hip hop y el ‘‘reggaeton’’», cuenta

Ha tenido tiempo estos días para prepararse sin presión y vuelve con el hambre de siempre. «Le ha venido bien esta semana», explicaba ayer Ancelotti. «Le veo a tope, motivado como siempre».

Cuando le expulsaron en Córdoba, la mayor preocupación era si la sanción le iba impedir jugar hoy. Para el club y para él fue un alivio saber que llegaría a tiempo. «Es evidente que Cristiano es un magnífico jugador y tenerle de vuelta siempre es un plus. Tengo ganas de volver a jugar con él y continuar ganando», decía ayer Bale.