«España pierde un tiempo muy valioso por no concretar una respuesta para el turismo»

Gloria Guevara es la primera dama del turismo mundial. Esta mexicana preside el Consejo Mundial de Viajes y Turismo (WTTC), que engloba a los 200 mayores operadores, entre ellos aerolíneas, aeropuertos, navieras, touroperadores y hoteleras. Un sector que representa el 10,3% del PIB mundial y uno de los más castigados por la epidemia.

Confinada a las afueras de Londres, en Sussex, Guevara se enfrenta a su segunda experiencia con un virus. No en vano, ya pilotó la recuperación de la industria turística mexicana tras el brote de gripe H1N1 desde su cargo como secretaria de Turismo. De esa experiencia descubrió algunos antídotos para la recuperación.

–¿Cuántos millones de empleos vinculados al turismo están en peligro?

–Se están perdiendo en el mundo un millón de empleos del sector cada día, por lo que estimamos que unos 75 millones de puestos de trabajo están en grave riesgo. El año pasado fueron 1 de cada 4 puestos de trabajo. Son empleos que este año no se van a crear. Dicho de otro modo, un 25% de los empleos se perderán si no se actúa. El turismo representa el 10% del PIB mundial, unos 8,8 billones de dólares. Pues bien, estimamos que se perderán 2,2 billones, una cuarta parte que corresponde a un trimestre completo.

– El tráfico aéreo cayó en marzo un 59,5% en Europa. Entre abril y mayo se prevé del 90%. ¿Qué ocurrirá si el confinamiento se extiende a junio o surge un rebrote?

– Hemos cuantificado confinamientos de 75 días a contar desde el pico (casi 11 semanas, como en Wuhan). Eso implica marzo, abril y mayo. Lo que puede ocurrir luego no podemos saberlo, pero sí conocemos que este es un sector muy resiliente, que logra salir adelante muy rápido. Siempre que quede algo que recuperar. Por eso, los gobiernos que pongan en marcha cuanto antes las medidas adecuadas van a salir a más velocidad y mejor de esta crisis. Lógicamente, no todos los mercados se van a recuperar al mismo ritmo.

– Usted ha advertido de la pasividad «devastadora» de los gobiernos con un sector tractor hiperrelacionado como este. ¿A qué se refiere?

– La WTTC interactúa a diario con 100 gobiernos. Conocemos de primera mano sus planes y aunque algunos han tomado medidas muy favorecedoras, otros han tardado en afrontar la situación y han dejado a los trabajadores y empresas solas.

– ¿Cómo valora las medidas del Gobierno español al respecto?

– En algunos ámbitos ha tomado medidas positivas, pero respecto a un sector clave para España como es el turismo, su pierde un tiempo muy valioso por no concretar una respuesta. Por supuesto, el tema sanitario es prioritario pero el económico y social también lo son. Cuando la gente pierde su empleo y los empresarios no tienen ingresos ni acceso a liquidez, puede generarse un problema social. El WTTC estudia las crisis del pasado. Trabajamos codo con codo con la OMS y, desde hace tres años, preparamos este tipo de escenarios. Lo que hemos descubierto es que el 90% del impacto económico de brotes epidémicos como este tiene que ver con las decisiones políticas que se toman.

– ¿En qué ha fallado el Gobierno español?

– No todos los sectores económicos han sido golpeados de la misma forma. Algunos incluso están sobrellevando esta crisis, como los supermercados o los productores alimenticios. Hay un acuerdo absoluto de que el sector turístico se encuentra entre los más castigados. Y lo que más necesita es mantener una mínima capacidad de liquidez. EE UU ha retrasado las obligaciones tributarias. Esto es clave, porque si un empresario puede retrasar estos pagos unos meses, tiene la opción de que sus empleos sobrevivan. Así se mantiene vivo el sector. Se trata de minimizar el impacto.

– La patronal turística calcula en casi 100.000 millones las pérdidas. ¿Le parece un cálculo ajustado?

– Me parece una cantidad aproximada teniendo en cuenta que el impacto del H1N1 fue de 50.000 millones y la crudeza de este virus es muy superior.

–¿Se puede parar el golpe?

– Sin empresas no hay trabajo. Por eso, en primer lugar, hay que eliminar la obligatoriedad de mantener el empleo seis meses después de un ERTE. En segundo lugar, hay que ofrecer liquidez. En este sentido, la UE tiene que actuar para ayudar a los países más afectados. En tercer lugar, se debe diferir el pago de los impuestos. Por último, hay que reformar la obligación de que las agencias de viaje devuelvan el dinero en 14 días. Ese impacto va a obligar a cerrar a muchos negocios vinculados al turismo. Pedimos que se ofrezca la opción de emitir un “vaucher” para que los clientes lo utilicen más adelante.

– ¿Le parece positivo adelantar ventas seis meses o un año con descuentos?

– No sé si bajar el precio es lo ideal, pero vender por adelantado ofrece liquidez y permite sobrevivir. Adelantar las ventas va a ser fundamental. Tenemos que asegurar que haya una industria turística después de esta crisis.

– ¿Hay alguna señal positiva dentro del caos?

– Vemos ya una recuperación gradual en China. La previsión es que primero se recupere el turismo nacional y los viajes de ocio. Más tarde llegarán los viajes internacionales.