Los torneos de golf de LA RAZÓN han vuelto

El trigésimo segundo torneo de golf LA RAZÓN fue madrugador. Con los primeros rayos de luz y la brisa de la sierra de Guadarrama, sus parajes naturales acogieron los primeros premios de golf celebrados tras la cuarentena. «Voy a por una chaqueta, que está refrescando, aunque luego subirá la temperatura», decía un participante que llegó al club de golf justo a la hora de apertura. Después de iniciar el mes de julio con un bochorno insoportable, la temperatura dio una tregua y permitió que el torneo se disputase sin sufrir los sofocos propios del verano segoviano. El cielo despejado, una leve brisa y una temperatura media de 28 grados. Estos datos de vital importancia para conocer el marco en el que se desarrollaría la competición estaban disponibles en la web del ASR Golf Club en el que tuvo lugar el evento. «Anoche llovió, así que la hierba está perfecta para jugar», explicaba el director del campo, Eduardo Tapia.

Todo estaba listo para dar inicio al campeonato, una fecha muy esperada por los aficionados a este deporte, porque la cita había tenido que posponerse debido a la crisis sanitaria. No obstante, LA RAZÓN puso en marcha su maquinaria organizativa, con todas las medidas de seguridad necesarias, para mantener la tradición y poder celebrar el evento. Este año, las instalaciones que acogieron el XXXII Torneo de Golf LA RAZÓN fueron las del ASR Golf Club, un clásico en las competiciones organizadas por el periódico. Los hoyos de este «green» son bien conocidos, ya que en ellos se han celebrado cerca de diez de estos torneos desde que hace nueve años, el 26 de mayo de 2011, tuviera lugar el primero.

Su éxito inicial presagiaba un gran recorrido para estas competiciones que ya cuentan con fieles participantes. Aurelia Basagoiti o Santiago de La Rocha no se pierden estos torneos, en los que además familias enteras refuerzan sus lazos. Los hay que hacen equipo con su pareja, con sus hermanos –como Carmelo y Jesús Ramírez o Gabriel y Jaime Malaver–, y también los hay que quieren incorporan a nuevas generaciones trayendo a sus hijos, por ejemplo, José Luis De Asua junto a su hijo Nicolás, todos ellos deseosos de coger los hierros y demostrar sus habilidades.

Un enclave único

ASR Golf Club está ubicado en plena Sierra de Guadarrama, un entorno incomparable que permite disfrutar de este deporte en un marco natural único, con un clima ideal, y tan solo a una hora de Madrid. ASR Golf fue inaugurado en mayo del 2010. El diseño de Blake Stirling y Marco Martín ha hecho de él un campo divertido y exigente en precisión, ambas cualidades siempre deseables en golf, sin olvidar algún hueco para la improvisación y la aleatoriedad. Gracias a esta combinación se puede disfrutar de 18 hoyos impar 71 de 6.328 metros de longitud. Las 60 hectáreas de césped están integradas en un espectacular encinar salpicado de rocas, atravesado por la profunda herida del barranco del río Moros.

Muchos aficionados acuden llamados por el golf y descubren la enorme variedad de actividades que ofrece la urbanización de Los Ángeles de San Rafael. Hay dos hoteles, uno de cuatro estrellas y otro de tres, uno de ellos ubicado junto al lago, donde se puede disfrutar de gran variedad de actividades acuáticas como canoas hinchables para los niños y paddle surf, entre otras. También hay una playa natural junto al lago, así como piscinas y otras actividades sobre tierra como paintball, circuito de motocross, pistas de tenis y campos de fútbol, para que a los amantes del deporte no les falte de nada. Además del magnífico restaurante del propio club, junto al lago se encuentra el Bahía Beach Club, especializado en arroces y su versión VIP, perfecta para tomar una copa.

Casi 60 jugadores se dieron cita en la nueva edición del Torneo de Golf LA RAZÓN. Los primeros participantes empezaron a llegar a partir de las 8:15 horas ataviados con sus deportivas, sus polos y el complemento indispensable en todo evento social en la actualidad: la mascarilla. En el ambiente se respiraba una sensación de cercanía que no logró perturbar la distancia impuesta por las medidas de seguridad para luchar contra la pandemia. Los compañeros de equipo se saludaban desde la lejanía o con el habitual choque de codos. Para recoger su ficha de juego, las llaves del buggy y su tradicional «welcome pack», los participantes acudieron con mascarilla, se les tomó la temperatura y se les dividió por orden alfabético y hoyo de inicio con el objetivo de evitar aglomeraciones.

Regalos de bienvenida

Los regalos de bienvenida estaban compuestos por el tradicional polo y bolas de juego y un estuche metálico de Álvarez Gómez, empresa madrileña que diversificó su producción durante la cuarentena para ofrecer geles hidroalcohólicos como los que estuvieron distribuidos por las distintas estancias de ASR Club de Golf. El lote cuenta con un agua de colonia concentrada de 300 ml y una loción corporal de 460 ml de aroma clásico, mediterráneo y atemporal. Siguiendo en esta línea, el «pack» lo completaban tres «body & hair mist» de Tropicania y unas muestras de protección solar de la misma marca para evitar quemaduras durante las horas de juego.

El photocall no podía faltar. Los asistentes se fueron acercando ordenamente tras recibir sus regalos de bienvenida y posaron con sus mejores sonrisas, aunque las mascarillas las ocultasen en ocasiones.

Tras las fotografías de rigor era el momento de calentar motores y desenfundar los palos para exhibir sus mejores golpes. Aunque el golf no sea el deporte por excelencia en España, cuenta con 270.000 federados y la pasión por los «hierros» se extiende mucho más allá. «El que se engancha es para toda la vida», decía uno de los asistentes al torneo.

Hay que agradecer su participación a los patrocinadores sin cuyo apoyo este torneo no habría sido posible. En este caso, a Lacooop, «lamadredelascooperativas», Communiti, Coca Cola, Maestros Jamoneros, Relojes Neckmarine, Fruit Punch Tropicania, Álvarez Gómez, a la cadena de tiendas de maletas y malitnes Tumi, y por último, al propio ASR Golf Club.

Rivalidad sana entre amigos

Es difícil encontrar una mejor manera de volver a la nueva normalidad que disfrutar de un espléndido día en el Club ASR en Los Ángeles de San Rafael, un complejo esculpido en plena sierra del Guadarrama, para celebrar el XXXII Torneo de Golf de LA RAZÓN. La competición que organiza este diario es ya una tradición que se celebra cada pocos meses desde hace diez años. A pesar de ser un clásico, esta edición estaba claro que iba a ser diferente. No solo por el ambiente, sino por ser la primera en que se celebraba tras el fin del estado de alarma.

Una vez hechas las presentaciones y los pertinentes controles de temperatura para garantizar la seguridad de los participantes, llegó el momento de demostrar quién ha aprovechado mejor los pocos días en los que se han podido practicar actividades deportivas tras el confinamiento.

Los 20ºC de temperatura y la brisa hicieron que el día no pareciera propio del mes de julio, al menos en sus primeras horas. El frescor mañanero sirvió para despertar a algunos participantes, pero también hizo que el calentamiento fuera más necesario que nunca. Ya desde la Casa Club se veía cómo la mayoría de los presentes aprovechaba para poner a tono sus músculos y articulaciones, pero también sus cuerdas vocales conversando sobre las ganas que tenían de volver a golpear la bola.

Uno no se da cuenta de cuánto echa de menos este deporte hasta que vuelve a oler el aroma de la hierba húmeda a primera hora de la mañana. «Empecé hace ya diez años y desde entonces no puedo parar», reflexionaba uno de los participantes minutos antes del comienzo de la competición. También era el momento para las bromas: «El día que sepa jugar, tendré que dejarlo», replicó uno de los compañeros del equipo, que lleva cerca de 20 años practicando golf.

Con los 17 equipos y los cerca de 60 participantes en sus respectivos hoyos de salida, el director de Golf del Club ASR, Eduardo Tapia, inauguró la jornada con el chupinazo que marcó el comienzo del torneo. Los primeros golpes dieron paso a los alardeos y los recuerdos de las competiciones de antes de la pandemia.

Un parón como el que hemos vivido afecta a cualquiera, por lo que los golfistas se mostraron muy prudentes a la hora de pronosticar cómo sería su desempeño en la competición. Pero las bromas y los elogios no tardaron en aparecer en cuanto se sucedieron los primeros golpes.

El viento, que era un buen aliado antes de la competición, se convirtió en un adversario más a superar, sobre todo en el hoyo 11, donde soplaba en contra y desviaba las bolas a su antojo. Los participantes con mayor atino celebraban un golpe realmente difícil de controlar: «Están jugando de maravilla», elogiaban sus compañeros de equipo. Otros no tuvieron tanta suerte. Y es que en esto del golf hay que levantarse con bien pie para que las bolas no se den un refrescante chapuzón en uno de los lagos del club o caigan en un búnker estratégicamente colocado para complicar la mañana a más de uno.

Los hoyos iban pasando y el viento se fue calmando, dando paso a un clima algo más propio del mes de julio, por lo que los pocos que se animaron a recorrer los 18 hoyos a pie quizá se estaban arrepintiendo de su decisión. No obstante, el entorno natural, con el embalse de los Ángeles al norte y el granito milenario de la Sierra de Guadarrama al sur, invitaban a disfrutar de la belleza del paisaje con más detenimiento. Además, el campo contaba con lugares estratégicos para recargar las pilas.

Sin embargo, varios participantes aprovecharon cualquier lugar para disfrutar del almuerzo que el Club se encargó de repartir durante el juego. «Hay que reponer fuerzas y continuamos», comentaba uno de los golfistas mientras quitaba el envoltorio.

Premios

MEJOR SCRATCH

Vicente Bort

CABALLEROS CATEGORÍA 1

Primer Premio:

José Luis Angullo

Segundo Premio:

Eduardo Javier Gómez Pioz

CABALLEROS CATEGORÍA 2

Primer Premio:

Santiago de la Rocha

Segundo Premio:

Juan Manuel Cartagena

DAMAS

Mejor resultado:

Aurelia Basagoiti

DRIVE MÁS LARGO HOYO 18

Julián de Lago

MEJOR APROACH

HOYO 3

Rafael Ventura

MEJOR APROACH

HOYO 14

Carlos de Miguel