Vivienda

La revolución del sueño y la optimización de espacio: la cama “voladora”

Permite ganar hasta 6 metros cuadrados y crear un despacho, un gimnasio o una zona de estudio para los más pequeños con un simple movimiento. ¿En que convertiría su habitación o estudio si de repente estuviera vacío?

Cama elevable de Espace Loggia
Cama elevable de Espace LoggiaLa Razón

La ilusión de una casa cambiante en función de nuestras necesidades es ya una realidad. Al entrar en una estancia la cama se eleva al techo y en su lugar aparece una mesa y estantería o mobiliario de almacenaje. Parece una especie de sueño futurista, pero estas soluciones habitacionales llevan años haciéndose un hueco en el mercado. España se había mantenido ajena a la mayoría de ellas, pero con la llegada de la pandemia y el aumento de horas que pasamos en casa también han llegado numerosas revoluciones, entre ellas la de las camas “voladoras”.

Con un simple movimiento, cualquier estancia se puede transformar en un espacio diáfano en el que trabajar, estudiar, leer o incluso socializar. Optimizar el espacio se ha convertido casi en una obligación debido al auge del teletrabajo y el tele-estudio. Las estancias adoptan nuevas funciones y el tamaño de nuestro hogar no siempre permite conciliar la vida laboral y familiar de forma sencilla. “Tu lecho al techo”, la iniciativa de Sébastien Chartier, trae a España las camas elevables del líder francés Espace Loggia que dan respuesta a este problema.

Cualquiera puede ser usuario de está solución. Los particulares que viven en un estudio quizás son los que más lo necesitan, pero también resulta muy útil para pisos más grandes en los que se quiere sacar mayor provecho a la habitación de los niños o invitados y crear un despacho o gimnasio donde antes no lo había.

Esto mismo es aplicable a las segundas residencias o inmuebles de alquiler turístico como los Airbnb, que debido a su ubicación céntrica suelen ser de pequeño tamaño, al “coliving” o a proyectos “build to rent” (construir para alquilar) ,cuyo mercado está creciendo de manera exponencial en los últimos años. Otro sector que lleva años apostando por las camas elevables son las residencias de estudiantes. Espace Loggia es líder en Europa desde hace 20 años implantando sus soluciones en residencias de estudiantes donde el espacio es limitado y los alumnos suelen compartir habitación.

Imagen de una habitación para niños
Imagen de una habitación para niñosLa Razón

Ganar hasta 6 metros cuadrados

Las camas “voladoras” son una inversión a largo plazo. Además de ganar el espacio que ocupa la cama, se gana también el espacio que hay que dejar para poder pasar, o el que ocupan las mesillas de noche. Según el fundador de “Tu lecho al techo”, con la instalación de este mobiliario se ganan entre 4 y 6 metros cuadrados. Por ejemplo, para que sirva de guía, un dormitorio individual amplio puede medir en torno a 11 metros cuadrados. En concreto, esta solución cuesta entre 2.500 y 5.500 euros, en función de lo que se quiera personalizar. Los tamaños oscilan desde una individual de 90x190 centímetros hasta una de matrimonio de 200x200. Existe, por ejemplo, la posibilidad de incorporar mesas de cena. Durante el día está abierta la mesa y durante la noche se baja la cama y este mueble se repliega. También está la opción de incorporar una mesa de trabajo e incluso un despacho completo que igualmente se puede elevar al techo junto a la cama, explica Chartier a LA RAZÓN. La selección de colores también corre a cuenta del cliente, que podrá completar su cama elevable con enchufes y luces led si así lo desea.

“En ciudades como Londres o París, donde el precio del metro cuadrado está por encima de 10.000 euros, las camas elevables se usan desde hace tiempo. En España, la vivienda se ha encarecido durante los últimos años. Cada vez se construyen pisos más pequeños y la gente necesita optimizar ese espacio. Además, con la pandemia todos tuvimos que pensar en reinventar nuestras casas”, explica Sébastien Chartier. Y usted, ¿en que convertiría su habitación o estudio si de repente estuviera vacío?