Supermercados

Indecencia podemita

Ione Belarra, la secretaria general de Podemos, acusó a Carrefour y Mercadona de estar forrándose subiendo precios al calor de la crisis inflacionista generada por la guerra en Ucrania

La secretaria general de Podemos, y ministra, Ione Belarra, cargó hace unos días contra Carrefour y Mercadona calificando a sus accionistas de indecentes y despiadados por el hecho de forrarse subiendo precios al calor de la crisis inflacionista generada por la guerra en Ucrania. Los errores de esta crítica son muy variados (por ejemplo, la crisis inflacionista no se debe única ni principalmente a la guerra en Ucrania), pero quiero centrarme en la acusación de que los supermercados se están forrando subiendo precios.

De entrada, tengamos presente que Belarra no cuenta con ninguna información que avale sus afirmaciones: las cuentas de resultados de 2022 de estas empresas las conoceremos a lo largo de las próximas semanas. A fecha de hoy, por tanto, es imposible saber si sus subidas de precios responden a una ampliación de su margen comercial o a que han trasladado sus mayores costes a los consumidores. ¿Cómo puede una ministra del Gobierno de España dirigir calificativos tan gruesos («indecentes» y «despiadados») a los accionistas de estas compañías (personificándolos, además, en una persona con nombres y apellidos como Juan Roig) sin contar siquiera con el más mínimo dato que avale su discurso? Por pura irresponsabilidad, imprudencia y populismo. Pero es que, además, las escasas cifras que manejamos hasta ahora no respaldan la tesis de Belarra.

Carrefour ya ha publicado su cuenta de resultados correspondiente al primer semestre de 2022 y lo que observamos es que su margen de beneficios sobre ventas fue de apenas el 0,6%. O dicho de otro modo: por cada euro que vendió Carrefour, apenas ganó en términos netos 0,6 céntimos de euro. Cuidado: no 0,6 euros, sino 0,6 céntimos, menos de un céntimo de ganancia por cada euro vendido. No es que Carrefour esté en la ruina: es que gana dinero no por margen sobre cada unidad vendida, sino por volumen de unidades vendidas. En lugar de ganar mucho con cada producto vendiendo muy pocos productos prefiere ganar poco con cada producto vendiendo muchos productos. Ese es el modelo de negocio tradicional de los supermercados: de hecho, Mercadona, la principal cadena de España, apenas tuvo un margen de 2,6 céntimos por cada euro vendido en 2021. De ahí que las acusaciones de Belarra, a la luz de lo que sabemos hasta el momento, sean tan poco decentes.