Bruselas ultima la multa de 1.000 millones a Google

La sanción por abuso de posición dominante en el mercado estará lista esta misma semana.

La Comisión Europea anunciará previsiblemente mañana la aplicación de una multa récord a la multinacional Google por abuso de su posición de dominio en el mercado, al primar en las búsquedas de los usuarios sus propios servicios de comparación de precios, Google Shopping, en detrimento de otros operadores, según adelantaron ayer varios medios de comunicación internacionales. El rotativo económico británico «Financial Times» aseguró el pasado 16 de junio que el ejecutivo comunitario estaba ultimando una multa por valor de unos 1.000 millones de euros, similar a la cantidad impuesta a Intel en el año 2009 por el mismo motivo y que alcanzó los 1.070 millones. No obstante, algunas fuentes aseguran que el Ejecutivo comunitario prepara una multa que batiría este registro, lo que la convertiría en la sanción más alta jamás impuesta a una empresa por abuso de su posición monopolística.

Aunque este anuncio se esperaba para dentro de unas semanas, todo hace indicar que las últimas informaciones aparecidas en los medios de comunicación han adelantado el veredicto que podría anunciarse tras la tradicional reunión del Colegio de Comisarios que tiene lugar todos los miércoles.

El anuncio de este castigo supondría el pistoletazo de salida a otras posibles sanciones, ya que Google acumula tres expedientes diferentes por parte del Ejecutivo comunitario. La pugna entre la multinacional estadounidense y Bruselas comenzó hace siete años, cuando la cartera de Competencia era ocupada por el español Joaquín Almunia. Con la llegada de la danesa Margrethe Vestager, la estrategia cambió y la nueva comisaria prefirió dividir los diferentes casos en pos de una resolución más rápida de los dosieres y una mayor capacidad de negociación con el gigante tecnológico estadounidense.

El celo de Bruselas respecto a Google y su abuso de posición de dominio en el mercado no ha hecho más que incrementarse en el último año. En abril del ejercicio pasado, Google también fue acusado de priorizar la instalación de su sistema operativo Android en los teléfonos móviles inteligentes en detrimento de otros sistemas en lo que sería un menoscabo de la capacidad de innovación europea. En julio del año pasado, Bruselas inició otro nuevo capítulo en su cruzada contra la multinacional al acusarle de abuso de su posición dominante en sus sistema de anuncios AdSense. El Ejecutivo comunitario considera que la empresa impone restricciones a terceros a la hora de ceder espacios a anuncios de sus competidores.

Una vez que esta multa se anuncie, la empresa tendrá tiempo para proponer una solución al Ejecutivo comunitario –en el caso de Microsoft, este periodo ascendió a 90 días–. Si este acuerdo no se produce, el gigante tecnológico podría ser multado de forma adicional con un 5% de su medio de volumen de ventas diarias por cada jornada de retraso. En el cálculo de la multa, Bruselas también tendrá en cuenta el número de años durante los que la multinacional ha abusado de su posición de dominio en el mercado. Según los cálculos del Ejecutivo comunitario, Google ha incurrido en esta practica desde 2008.