Opinión

De cómo las subidas indiscriminadas y vía decretazos del salario mínimo se usan para tapar otras carencias de gestión

Es vergonzante la intromisión política constante en la economía

El comité de expertos de Díaz propone subir el salario mínimo en 2023 hasta 1.082 euros y que se revise en seis meses
El comité de expertos de Díaz propone subir el salario mínimo en 2023 hasta 1.082 euros y que se revise en seis meses

Fue una exigencia de Europa la de ir armonizando los salarios mínimos, por lo que las primeras subidas tenían cierta relevancia y aceptación en esa coyuntura. El problema fue cómo se realizaron las mismas con el fin de sacar réditos políticos a una medida económica, que posteriormente se siguió utilizando indiscriminadamente a base de decretazos «bomba» para justificar o tapar otras carencias de gestión.

Salario mínimo
Salario mínimoLa Razón

Tomar medidas sin acudir al diálogo social e imponiendo burdamente las formas y los tiempos parece no ser para nada acertado, máxime con el nivel de producción de nuestra economía, con una deuda exarcebadamente elevada y con un paro incontrolable; camuflado además intencionadamente entre fijos discontinuos, trabajo público en fechas concretas y otras artimañas de dudosa moralidad económica, que no política como vemos asiduamente. Nuestro tejido empresarial no es similar al del resto de Europa, y nuestra gran ventaja de pymes esforzadas se intenta destruir en pro de aspectos relativos como es una nueva subida de impuestos y cotizaciones encubiertas. Las máximas beneficiadas de éste tipo de medidas son las administraciones, que reciben más cotizaciones y más impuestos, mientras que el ciudadano sigue teniendo igual o inferior poder de compra.

Es vergonzante la intromisión política constante en la economía, que además permite a algunos el acceso a ingeniería fiscal legalmente aceptada en sus sociedades, mientras las pymes deben aguantar el golpe sin posibilidad de derivación alguna. La constante improvisación legislativa en éste tema, como en otros, se traduce en un efecto contrario una vez más, no pudiendo asumir muchas pymes tales dictados con consecuencias fatales para el empleo por todos conocidas. No hace falta recordar la cifra de autónomos en «decesos». Pero para ver eso señorías hay que pisar la calle y ver el frío, no «sondear» opiniones.

Las nuevas subidas traerán nuevos obstáculos a los jóvenes y colectivos más desfavorecidos, que se seguirán además formando para cobrar lo mismo que alguien sin estudios, ya que la supuesta subida no impacta exponencialmente a todos los niveles, sino que nos iguala por abajo en su mayoría.

Los medidores de referencia fija o variable acoplados al SMI pueden generar consecuencias fatales y dejarán de abonarse en muchos casos, becas, ayudas, baremos de prestaciones, produciendo dantescas situaciones. Mientras que los deudores y defraudadores disfrutarán de mejores vidas atendiendo a la inembargabilidad de dicho salario.

Víctor Fermosel es profesor de EAE Business School