Opinión
Distintas políticas, distintos resultados: los bajos impuestos de Madrid frente a la asfixia fiscal del Estado
La diferencia fiscal entre Madrid y el Estado se nota al calcular la liquidación anual del IRPF en junio. Madrid ofrece bajos impuestos, estabilidad y contención del gasto. Sánchez otorga más gasto, déficit, deuda e impuestos confiscatorio
Las bajadas de impuestos en Madrid son una historia de éxito, que comenzó tras llegar Esperanza Aguirre a la presidencia de la Comunidad y que continúa más de veinte años después con Isabel Díaz Ayuso como presidenta. Desde entonces, paso a paso, adecuando las rebajas a la coyuntura económica y al cumplimiento de la estabilidad presupuestaria, la Comunidad de Madrid ha bajado los impuestos de manera continuada.
La política económica seguida en Madrid, de bajos impuestos y estabilidad presupuestaria, así como una elevada contención del gasto entre 2011 y 2015, se enfrenta a la del Gobierno de la nación, diametralmente opuesta: gasto creciente, déficit abultado, deuda exponencial e impuestos cuasi confiscatorios. En este último punto, el de los impuestos, la diferencia es notable, que, en el caso de la renta, se puede comprobar al calcular la liquidación anual de IRPF que realizamos en junio. En ella, en el resumen, aparece claramente tanto el tipo medio estatal como el tipo medio autonómico, que se obtiene del cociente entre el impuesto pagado y la base que constituye dicho impuesto. Si lo analizamos, podemos comprobar el importante ahorro que los contribuyentes madrileños obtienen frente al tramo estatal, para cualquier renta que generen, tal y como se puede comprobar en el propio simulador de IRPF de la Agencia Tributaria.
Para un contribuyente madrileño con rentas del trabajo de 20.000 euros, el tipo medio estatal es de un 6,56% frente al 5,51% del tipo medio autonómico. Es decir, gracias a los impuestos más bajos de Madrid, se ahorra 1,05 puntos en el tramo autonómico, que equivale a 2,1 puntos si fuese sobre el total de la tarifa y que, en porcentaje, supone un tipo medio efectivo regional un 16% menor que el nacional.
Para un contribuyente madrileño con rentas del trabajo de 45.000 euros, el tipo medio estatal es de un 11,8% frente al 10,32% del tipo medio autonómico. Es decir, gracias a los impuestos más bajos de Madrid, se ahorra 1,48 puntos en el tramo autonómico, que equivale a 2,96 puntos si fuese sobre el total de la tarifa y que, en porcentaje, supone un tipo medio efectivo regional un 12,5% menor que el nacional. Es decir, además, la medida es progresiva, porque el ahorro porcentual sobre el tipo medio estatal es mayor en las rentas más bajas.
Para un contribuyente madrileño con rentas del trabajo de 60.000 euros, el tipo medio estatal es de un 13,63% frente al 12,25% del tipo medio autonómico. Es decir, gracias a los impuestos más bajos de Madrid, se ahorra 1,38 puntos en el tramo autonómico, que equivale a 2,76 puntos si fuese sobre el total de la tarifa y que, en porcentaje, supone un tipo medio efectivo regional un 10,1% menor que el nacional.
Para un contribuyente madrileño con rentas del trabajo de 100.000 euros, el tipo medio estatal es de un 17,15% frente al 15,65% del tipo medio autonómico. Es decir, gracias a los impuestos más bajos de Madrid, se ahorra 1,5 puntos en el tramo autonómico, que equivale a 3 puntos si fuese sobre el total de la tarifa y que, en porcentaje, supone un tipo medio efectivo regional un 8,8% menor que el nacional.
Para un contribuyente madrileño con rentas del trabajo de 200.000 euros, el tipo medio estatal es de un 19,89% frente al 18,13% del tipo medio autonómico. Es decir, gracias a los impuestos más bajos de Madrid, se ahorra 1,76 puntos en el tramo autonómico, que equivale a 3,52 puntos si fuese sobre el total de la tarifa y que, en porcentaje, supone un tipo medio efectivo regional un 8,8% menor que el nacional.
Para un contribuyente madrileño con rentas del trabajo de 300.000 euros, el tipo medio estatal es de un 20,77% frente al 18,93% del tipo medio autonómico. Es decir, gracias a los impuestos más bajos de Madrid, se ahorra 1,84 puntos en el tramo autonómico, que equivale a 3,68 puntos si fuese sobre el total de la tarifa y que, en porcentaje, supone un tipo medio efectivo regional un 8,8% menor que el nacional.
Es decir, además, la medida es progresiva, porque el ahorro porcentual sobre el tipo medio estatal es mayor en las rentas más bajas. Madrid gasta menos, tiene impuestos más bajos, menor déficit, menor deuda y crece más que el conjunto nacional, que aplica la política económica opuesta a la madrileña. Ahí están los datos y el modelo de éxito es el de gasto limitado, estabilidad presupuestaria, impuestos bajos y reformas profundas. Distintas políticas dan distintos resultados