Empleo

El empleo público cae en picado tras las elecciones municipales y autonómicas

En Cantabria, el 68% de la afiliación hasta marzo la proporcionó el sector público

Trabajadores en una obra pública en el País Vasco.
Trabajadores en una obra pública en el País Vasco.larazon

En el primer trimestre del año, en promedio, el sector público generó el 20% del nuevo empleo. En el segundo semestre, con las elecciones ya olvidadas, las tornas cambian y el empleo público cae en picado.

Con las elecciones municipales y autonómicas en el horizonte -se celebraron el 27 de mayo-, los gobiernos regionales y locales incrementaron el gasto público en los primeros meses del año. Su efecto quedó nítidamente reflejado en el comportamiento del mercado laboral, con una aportación positiva del empleo público al avance promedio trimestral de la afiliación a la Seguridad Social.

Según el análisis regional del cuarto trimestre de BBVA Research, en el primer trimestre del año, en promedio, el sector público generó el 20% del nuevo empleo, aunque en La Rioja sólo explica el incremento de un 8% de la afiliación. En otras, sin embargo, es la razón que justifica buena parte de la creación de empleo en este periodo. En Cantabria, el 68% de la afiliación hasta marzo la proporcionó el sector público, mientras que en Canarias ascendió al 37%.

En el segundo semestre, con las elecciones ya olvidadas, las tornas cambian y el empleo público cae en picado. La contribución del sector público a la afiliación se vuelve incluso negativa en varias comunidades autónomas como Cantabria (-0,7), Andalucía (-0,2%) y Castilla y León (-0,1%). Lo mismo sucede, aunque a niveles inferiores, en La Rioja, Castilla-La Mancha, Aragón y Asturias.

El incremento del gasto público ligado al ciclo electoral se hizo evidente en la obra pública. Pese a sus problemas de déficit excesivo, en los tres primeros meses del año, las comunidades autónomas licitaron proyectos por valor de 790 millones de euros, un 64,2% más que en 2014, según datos de la patronal, Seopan. Más de una cuarta parte del importe, 204 millones, corresponden a la Comunidad de Madrid, un 28% más que en 2014. Porcentualmente, el mayor incremento se registró en Castilla-La Mancha. De no aprobar un solo proyecto de obra pública en los tres primeros meses de 2014 ha pasado a licitar contratos por valor de 16 millones de euros. Significativo fue también el incremento de Aragón, que pasó de 6 a 49 millones de obra pública en el primer trimestre del año. Sólo tres comunidades, Andalucía, Canarias y Murcia y la ciudad autónoma de Melilla redujeron sus licitaciones en el periodo.

Aunque el anuncio de la licitación de un gran contrato acapare titulares informativos y se pueda percibir como un incremento inmediato de actividad, no es esa la realidad. Desde que se produce, suelen transcurrir varios meses, que pueden llegar al año, hasta que el contrato se adjudica a la compañía constructora. Después, los trabajos avanzan en función de la disponibilidad presupuestaria de cada administración. De esta forma, como explican en el sector, puede suceder que un proyecto se alargue años y más años después de su adjudicación porque no hay dinero para completarlo.