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Estos son los gastos del coche que se puede desgravar en su declaración de la Renta

Los autónomos pueden acceder a beneficios si vinculan la compra de un vehículo y el mantenimiento a su actividad profesional

Concesionarios cerrados; ITV y talleres abiertos
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Los autónomos pueden acceder a beneficios si vinculan la compra de un vehículo y el mantenimiento a su actividad profesional

Los contribuyentes están apurando el mes largo que queda para que finalice la campaña de la declaración de la Renta para sacar el máximo partido a su cita anual con Hacienda. El coche representa una parte importante de los gastos de las familias y lograr deducirse el coste del mantenimiento o la compra de un vehículo es una partida a tener en cuenta, sobre todo para los autónomos. Pero, ¿es posible que una persona física pueda declarar la adquisición de un vehículo o los desplazamientos? La respuesta es sí, pero en casos muy concretos, según el "Marketplace"de adquisición de coches Trive.

La compra de un coche nuevo sólo es deducible para los autónomos o para aquellos que puedan vincular la adquisición a la realización de una actividad. Algunas profesiones, como las vinculadas al transporte de viajeros, agentes comerciales, servicios de vigilancia, transporte de mercancías o autoescuelas, podrán incluso desgravar la totalidad del IVA de la compra del vehículo. Por otro lado, los costes de mantenimiento, como los carburantes, pueden desgravarse hasta en un 50% para los autónomos que puedan vincular su actividad con el uso del coche, siempre y cuando el disfrute no sea particular.

La adquisición de un coche a través de «renting» y «leasing» se ha convertido en una de las opciones más interesantes para los autónomos, ya que pueden desgravar hasta el total de la cuota neta, tanto en el Impuesto sobre Sociedades como en el IRPF.

Las personas físicas, por norma general, no pueden acceder a estos beneficios. No obstante, en caso discapacidad, familia numerosa o si han obtenido ayudas de organismos oficiales para la compra, como el plan Prever o Renove, pueden deducirse los gastos del coche. Si la compra del vehículo está ligada al transporte de personas con discapacidad o movilidad reducida, independientemente de quién sea el conductor, pueden desgravarse hasta el 50% del IVA (del 4%, en lugar del 21%). Esta exención fiscal se aplica, exclusivamente, en la adquisición de vehículos nuevos y sin matricular. Además, las personas con minusvalía igual o superior al 33% pueden “ahorrarse” el impuesto de circulación. Por su parte, las familias numerosas cuentan con una bonificación del 50% en el impuesto de matriculación si el vehículo se pone a nombre de los padres y, al igual que en el caso de discapacidad, pueden desgravarse la mitad del IVA.

Los coches “eco” también tienen ventajas ante Hacienda

El coche de empresa se considera una retribución en especie, pero si el uso es exclusivo para trabajar no es necesario tributar por él. Si el vehículo está a nombre de la empresa, puede desgravarse un 20% anual del coste de la compra. Además, la normativa actual permite reducir la valoración de coche de empresa si cumple los requisitos ecológicos. Concretamente, hasta un 15% si las emisiones no superan los 120g/km y su valor no excede los 25.000 euros; un 20% si es híbrido y no supera los 35.000 euros; o un 30% si es energéticamente eficiente.