La Renfe alemana prestará servicio en el corredor La Coruña-Oporto

La CNMC considera que su propuesta beneficia a los usuarios porque proporciona nuevas frecuencias y posibilitará la aparición se servicios combinados.

Renfe tendrá un nuevo y duro competidor: su homólogo alemán, Deutsche Bahn (DB). La Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) ha autorizado hoy a su filial en España, Arriva, a operar el corredor intenacional entre La Coruña y Oporto. Aunque la liberalización efectiva del transporte ferroviario de pasajeros no sujeto a la obligación de servicio público no se producirá hasta diciembre de 2020, las conexiones internacionales ya están abiertas a la competencia.

Renfe había solicitado un estudio a la CNMC argumentando que otro operador en esta línea supondría un importante menoscabo económico para sus intereses puesto que reduciría el número de pasajeros que utilizan el corredor, que tiene la consideración de Obligación de Servicio Público (OSP). No obstante, la CNMC ha concluido que, después de haber realizado una prueba de equilibrio económico que pondera la pérdida de ingresos con los posibles ahorros de costes de Renfe, la incidencia financiera neta de un competidor en el corredor es “muy inferior” al 1% para la operadora pública, mientras que el umbral establecido en la Metodología de Equilibrio Económico es el 1%.

Competencia considera, además, que la entrada de un segundo operador en la línea será beneficiosa para los usuarios. En su opinión, aumentará la frecuencia de trenes y se facilitará la creación de ofertas intermodales, que complementarán el servicio ferroviario con la conexión con su red local e interurbana de autobuses.

El desembarco de DB supone la llegada del segundo competidor para Renfe. La CNMC ha autorizado también al consorcio conformado por Ilsa y Acciona a explotar la línea internacional entre Madrid y Montpellier, que tendrá parada en Barcelona.