Los pensionistas ganarán un «extraordinario» poder adquisitivo en 2013

El secretario de Estado de Seguridad Social, Tomás Burgos, ha asegurado hoy que en 2013 los pensionistas "van a ganar poder adquisitivo de forma extraordinaria", gracias a que la inflación se mantendrá en niveles muy bajos.

Durante su comparecencia ante la Comisión de Presupuestos del Senado, Burgos ha recordado las pensiones inferiores a 1.000 euros mensuales (alrededor del 75 % del total) han subido el 2 % este año, en tanto que el resto lo ha hecho un 1 %.

De esta forma, ha dicho que si la inflación interanual (mes con el que habitualmente se revalorizaban las pensiones) se mantiene en noviembre cerca del 0 % "la recuperación va a ser muy importante, y negar eso es un ejercicio ineficiente en términos de debate público".

Por eso mismo, ha considerado "cuanto menos, apresuradas"las críticas al nuevo índice de revalorización de las pensiones, que desligará su subida anual de la evolución del IPC.

Según ha dicho, el poder adquisitivo de los pensionistas no se protege con "declaraciones voluntaristas", sino con sistemas que generen recursos y permitan sostenerlas en el tiempo, que es el objetivo de la reforma promovida por el Gobierno y actualmente en trámite parlamentario.

"Nuestro compromiso con las pensiones está fuera de toda duda: ni las congelaremos ni las reduciremos. El objetivo de las reformas es que el sistema llegue con solidez a las generaciones futuras", ha afirmado.

"Nos preocupa configurar un sistema estable y sólido para que llegue a las generaciones futuras, no debatir unas décimas de poder adquisitivo más o menos", ha añadido.

Respecto a los presupuestos del sistema para 2014, ha dicho que responden a un criterio realista y prudente ante una situación económica que empieza a cambiar y que permitirá ir volviendo a la senda del equilibrio.

Sobre 2013, ha dicho que se está intentando que el déficit del sistema sea el menor posible y que trabajarán "hasta el último momento para arañar cualquier décima"a una previsión que sitúa el desequilibrio de las cuentas en el 1,4 % del PIB.

Ha explicado que el déficit actual de la Seguridad Social es sobre todo coyuntural y responde a los altos niveles de desempleo que han provocado una disminución significativa del número de cotizantes a lo largo de la crisis.

No obstante, ha reiterado que la salida de la crisis y la recuperación del empleo no solucionarán el problema estructural al que se enfrenta el sistema, que es el demográfico y que no conviene "minusvalorar ni desacreditar".

En este sentido, ha recordado que en diez años habrá 19,7 millones de personas mayores de 65 años y el doble de mayores de cien años, razón por la que considera ineludible la regulación del factor de sostenibilidad, que adecuará la pensiones a la esperanza de vida.