Más de 1,6 millones de contribuyentes quedarán exentos de tributación

El mínimo personal del IRPF se incrementará de los 5.150 euros actuales a los 5.550 a partir de 2015, cuando entre en vigor la reforma fiscal, cuyo anteproyecto de ley presentó este lunes en rueda de prensa el ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro.

Junto con el aumento del mínimo personal, la reforma del IRPF incluye un incremento de la reducción por rendimientos del trabajo para las rentas inferiores a los 14.400 euros y, a partir de este nivel de ingresos, se va recortando, pero no desaparece, según precisó el secretario de Estado de Hacienda, Miguel Ferre.

Otra de las novedades en el impuesto, que bajará una media del 12,5% hasta 2016 y dejará exentos de tributación a 1,6 millones de contribuyentes con rentas inferiores a 12.000 euros, es la modificación del régimen fiscal de impatriados, con el objetivo de atraer a España personas con talento y personal altamente cualificado, por ejemplo, del ámbito científico o económico, para trabajar en empresas establecidas en el país, pero se excluyen a los deportistas profesionales.

En concreto, se fija un tipo específico del 24% para los primeros 600.000 euros de retribución, mientras que el resto de los ingresos que excedan esa cifra tributarán al tipo marginal máximo del IRPF como cualquier otro contribuyente.

Por otro lado, el Impuesto de la Renta de no residentes se adecua a la tributación del IRPF, de tal manera que el tipo general baja del 24,75% al 24%. El tipo para rentas de la Unión Europea se reduce del 24,75% al 20% en 2015 y al 19% en 2016.

Montoro destacó que la reforma del IRPF está especialmente diseñada para beneficiar a las rentas medias y bajas. Así, el 72% de los declarantes, que cuentan con rentas inferiores a 24.000 euros al año, disfrutarán de una rebaja media del 23,47%, rebaja que será del 19,34% para los contribuyentes con una renta inferior a 30.000 euros, y del 16,72% para rentas inferiores a 60.000 euros.

Por otro lado, los mínimos familiares se incrementan una media del 32% y se crean tres nuevos 'impuestos negativos' o categorías de beneficios fiscales para familias o personas con discapacidad, que recibirán 1.200 euros anuales, a razón de 100 euros al mes, que son acumulables entre sí y similares a la deducción actual por cuidado de hijos menores de tres años, que también se mantiene. La suma de todos estos 'impuestos negativos' puede llegar hasta los 6.000 euros anuales.

Por último, la nueva escala del impuesto se articula en cinco tramos, frente a los siete actuales, y entrará en vigor en dos fases: la primera en 2015, con un tipo mínimo del 20% y un máximo del 47%, y la segunda fase en 2016: donde el tipo mínimo se situará en el 19% y el máximo, en el 45%.

Montoro, ha asegurado que la reforma fiscal que ha presentado el Gobierno y que llevará a las Cortes a principios de julio es la que "conviene"al país ahora que las cosas "han cambiado".

En una rueda de prensa para presentar las líneas generales de la reforma fiscal, Montoro ha mostrado una "especial satisfacción"por poder hacer una propuesta a la sociedad que consiste en reducir algunos de los grandes impuestos.

En este sentido, ha recordado que el Gobierno simplificará el IRPF y reducirá los tipos para todos los tramos, al tiempo que bajará el Impuesto de Sociedades cinco puntos y reducirá las retenciones de los trabajadores autónomos para favorecer la competitividad empresarial.

Además, el Ejecutivo ha renunciado a subir el IVA y a tocar los Impuestos Especiales, salvo exigencias de Bruselas, para no perjudicar el consumo en un momento en el que la economía española vuelve a repuntar.

En este sentido, Montoro ha asegurado que la recaudación de este impuesto se está recuperando y ha asegurado que un sistema fiscal excesivamente basado en la imposición indirecta genera inequidades entre los contribuyentes.

La reforma fiscal, tal y como ha dicho, se implementará en dos fases y dará lugar a un incremento del PIB del 0,55% en 2015 y 2016, lo que reducirá su coste bruto inicial (unos 9.000 millones) a algo más de 4.000 millones de euros.

"Las cosas han cambiado", ha dicho el ministro en más de una ocasión, tras admitir que al principio de la legislatura tuvo que hacer una política "muy dura"que a todos "ha contrariado". A su parecer, si el Gobierno no hubiera hecho lo que hizo cuando llegó al poder, no habría podido plantear ahora una rebaja fiscal a los ciudadanos.

Así, Montoro ha justificado una vez las medidas que tomó el Ejecutivo de Mariano Rajoy en 2011, cuando tenía la "urgente necesidad"de financiar los servicios públicos. "Hemos evitado el rescate de la economía, que habría implicado una reducción dramática de los servicios públicos", ha dicho.

A su juicio, la situación de "incipiente recuperación"permite al Gobierno plantear una rebaja de impuestos con la que pretende impulsar la creación de empleo, mejorar la capacidad de competir de las empresas y ser consecuente con los objetivos de déficit comprometidos.

De hecho, ha asegurado que las grandes cifras de la reforma son "perfectamente coherentes"con el programa de estabilidad, que ya ha sido aceptado por Bruselas y por el Fondo Monetario Internacional (FMI), por lo que la reforma no debería generar críticas.

Aunque ha reconocido que hay más cosas que "tiene en la cabeza"y que le gustaría hacer, ha garantizado que la reforma incluye "lo que toca hacer en estos momentos"y lo que "conviene"al país teniendo en cuenta los límites que impone la situación económica.

En este sentido, ha asegurado que en la medida en que las cosas vayan mejorando el Gobierno seguirá tomando medidas como las que tomó en otra época y que son las que verdaderamente fortalecerán la recuperación.

Por otro lado, el ministro ha defendido el "respeto"que ha mostrado el Gobierno al redactar una reforma que no "entra ni toca nada"de la autonomía de las comunidades.

De hecho, la reforma finalmente no modifica el Impuesto de Patrimonio ni el de Sucesiones y Donaciones, a pesar de que se había especulado sobre la posibilidad de que el Gobierno fijara un denominador común para todas las regiones.

En este sentido, Montoro ha recordado que este mismo jueves se celebrará un nuevo encuentro del Consejo de Política Fiscal y Financiera (CPFF) en el que el Gobierno abordará con todas las comunidades la reforma fiscal.

Con la publicación del anteproyecto en la página web del Ministerio de Hacienda, se ha abierto un plazo de consulta pública que finalizará en dos semanas para que el Consejo de Estado, el Consejo General del Poder Judicial y la Agencia de Protección de Datos puedan redactar sus informes perceptivos.

El texto además, se ha enviado a las comunidades autónomas, con las que se debatirá este mismo jueves en el CPFF, y a los agentes sociales, para que tengan la oportunidad de analizarlo y hacer aportaciones.

Cuando el Gobierno reciba todas las recomendaciones e informes, redactará el texto definitivo del proyecto de ley, que aprobará en Consejo de Ministros y remitirá a las Cortes en el mes de julio.