Banca

Oliu no cede ante los independentistas y descarta de nuevo que Sabadell retorne la sede a Cataluña: "No ha habido cambios"

El presidente de Sabadell confirmó que la filial británica TSB seguirá ligada al banco "porque va muy bien" y descartó los rumores de fusión con Unicaja. La junta de accionistas aprobará mañana el pago de un dividendo complementario de tres céntimos por acción con cargo a los resultados de 2023

El Banco Sabadell presenta resultados
El presidente del banco Sabadell, Josep OliuJavier LizónAgencia EFE

No habrá regreso de la sede central de Banco Sabadell a Cataluña "porque estamos donde estamos y no tenemos idea de cambiarlo"; la filial bancaria de TSB continúa sin estar en venta "porque es una empresa rentable que nos está dando muchas satisfacciones"; y el banco está en un "momento de posicionamiento de valor" y "nos va muy bien". Estos fueron los tres axiomas que ha vuelto a poner en valor el presidente no ejecutivo de la entidad, Josep Oliu, en la habitual reunión previa con periodistas antes de la Junta de accionistas de Banco Sabadell.

Así, Oliu quiso dejar claro que el banco que preside no tiene ninguna intención de retornar la sede central a Barcelona porque "no lo vemos necesario. Tenemos tres sedes operativas en Alicante, Madrid y Barcelona y no vamos a hacer ningún cambio". Con esta declaración ha vuelto a dejar claro que las presiones por parte de las formaciones independentistas catalanas, sobre todo por parte de Junts, no han hecho mella y ha rechazado el retorno, pese a las amenazas de posibles sanciones económicas a las empresas que se fueron si en las próximas elecciones la ganadora es la formación que preside Carlos Puigdemont. "No estamos en eso", zanjó el presidente bancario.

También quiso quitar hierro a las tensiones políticas que se viven en Cataluña, porque "la política y la empresas van por caminos distintos, y las empresas van bien. Hay que hacer una disociación entre ambas cosas y, de momento, las citas electorales van por otro lado y no están afectando a la buena marcha de la economía".

Asimismo, volvió a reiterar que su filial británica está teniendo unos "excelentes resultados" y "no tenemos intención de aceptar ninguna oferta de compra, sobre todo porque ahora es mucho más cara después de los grandes resultados que hemos obtenido", resaltó Oliu, que insistió en que "ahora mismo no manejamos ninguna operación en este sentido en el horizonte cercano".

A preguntas sobre su opinión a cuenta de la ampliación de la participación del Estado en el accionariado de Telefónica, Oliu no quiso mojarse y tiró de ironía para contestar. "De lo que estamos seguros es de que no va a entrar en Banco Sabadell". En este sentido, descartó de nuevo cualquier negociación con Unicaja para unir las dos entidades. Al menos sí admitió esta vez que "existen contactos", pero descartó que sobre la mesa haya un plan de fusión. "No hay nada de nada, sólo amistad con todos los colegas del sector nacional y europeo, pero nada más".

No quiso posicionarse tampoco sobre quién le gustaría que fuera el nuevo gobernador -o gobernadora- del Banco de España y se ha limitado a defender lo realizado durante los últimos seis años por Pablo Hernández de Cos. "A mí me gustaría que siguiera seis años más porque es uno de los mejores, técnica y humanamente”, y se ha agarrado a la posibilidad de que el mandato pueda prolongarse dos años más -para equipararlo al modelo del resto de bancos centrales y del propio BCE- y sólo ha pedido que el sucesor "sepa estar a la altura del puesto".

La junta general de accionistas del Banco Sabadell aprobará mañana -si no hay sorpresas de última hora- el pago de un dividendo bruto de tres céntimos por acción con cargo a los resultados de 2023, ejercicio en el que obtuvo un récord de 1.332 millones y un 55,1% más que en 2022. Se trata de un dividendo complementario que se suma a los tres céntimos que ya abonó el banco en diciembre, totalizando así seis céntimos. A esto se suma una recompra de acciones de 340 millones, lo que supondrá una remuneración total al accionista de 666 millones de euros, un 55% más que en el ejercicio anterior. Así, el 'pay-out' -porcentaje del beneficio destinado a dividendo- se mantiene en el 50%.

Asimismo, los accionistas decidirán puntos habituales de las juntas, como las cuentas de 2023 y las remuneraciones de los consejeros. Según ha informado la entidad, Josep Oliu recibió una retribución de 1,7 millones de euros en 2023, un 3,62% menos que el año anterior, y el consejero delegado, César González-Bueno, cobró 1,8 millones, un 27,4% menos, por una aportación extraordinaria al plan de pensiones. El conjunto del consejo percibió una retribución ordinaria total de 6,73 millones de euros en 2023, un 6,81% menos.

La junta general también votará la entrada de Ana Colonques como consejera independiente en el lugar que deja José Manuel Martínez, después de que haya presentado su renuncia como consejero independiente. La intención de la entidad con sede en Alicante es facilitar la entrada de una mujer y cumplir con los criterios de diversidad recomendados por las normas de buen gobierno.

Ana Colonques es la actual responsable del departamento financiero de Porcelanosa y, con anterioridad ha desempeñado el puesto de analista de riesgos en Banco Sabadell, entre marzo de 2010 y diciembre de 2011. Además, es consejera en Iberdrola desde noviembre de 2021, así como miembro del consejo de la Comunidad Valenciana de la Asociación Española de Directivos (AED) desde septiembre de 2018. Ha sido también miembro del consejo asesor regional de la Comunidad Valenciana de BBVA entre diciembre de 2015 y el pasado mes de febrero.

En la misma línea de renovación de género, el banco también propondrá a sus accionistas la reelección de Mireya Giné como consejera independiente, así como la aprobación de las cuentas y la gestión de 2023, la reelección de KPMG como auditor y el informe anual de remuneraciones de los consejeros del pasado ejercicio.