Editoriales

5G, la gran apuesta por el futuro de España

Los poderes públicos deben apoyar a las grandes empresas tecnológicas

5G, la gran apuesta por el futuro de España
5G, la gran apuesta por el futuro de EspañaAlberto R. RoldánLa Razón

LA RAZÓN ha reunido a tres grandes empresas tecnológicas de alcance mundial, Telefónica, Huawei y Microsoft, con la plana mayor del Gobierno y una notable representación del principal partido de la oposición en un Foro de puesta al día, análisis y discusión de un instrumento, la tecnología del 5G, que consideramos esencial para el futuro económico y social de España. Sólo un país plenamente integrado en las modernas redes de comunicación de alta velocidad y capacidad de procesamiento de datos, que asegure la interconectabilidad de todos aquellos dispositivos que ya forman parte de la vida cotidiana de la mayoría de los ciudadanos y de las principales empresas, y que, tarde o temprano, deberán ser de obligada dotación en los servicios públicos, podrá asegurarse un puesto de cabeza, sinónimo de prosperidad, igualdad y libertad, entre las naciones del mundo.

Hablamos de velocidades de trasmisión de milisegundos, de la posibilidad de interconectar más de un millón de dispositivos por kilómetro cuadrado, de hacer de los actuales teléfonos móviles centros de procesamiento de datos más rápidos, potentes y versátiles. En definitiva, de llegar con las nuevas tecnologías de la comunicación a todos los sectores productivos y a todos los ciudadanos, con independencia del lugar donde residan y de sus condiciones personales. Es fundamental para un país como el nuestro, con notables desequilibrios poblacionales – tantos que se ha acuñado la expresión «la España vacía»– y con muchos sistemas de producción poco eficientes, que restan competitividad nacional, por no hablar de las evidentes carencias de la Administración, no perder la batalla tecnológica. Afortunadamente, no partimos de cero ni mucho menos. Las tres empresas de referencia, gigantes en cada uno de sus campos, que están estrechamente imbricados en el desarrollo de las telecomunicaciones del futuro, son ejemplo no sólo de lo ya hecho, sino de las grandes posibilidades que tenemos como sociedad y como país.

Una compañía como Telefónica ha conseguido llevar el 5G al 65 por ciento de la población en cuestión de meses, una labor ingente que, por citar un ejemplo, ha necesitado poner en funcionamiento más de 2.900 nodos. Por no hablar de la eficiencia de la antenas y dispositivos móviles de Huawei o lo que suponen las «nubes» y la inteligencia artificial de Microsoft. Estas grandes empresas, es cierto, suponen una de las grandes bazas españolas, pero, y es de una importancia capital, que desde los poderes públicos, desde las principales formaciones políticas nacionales se las apoye sin cortapisas. Que se remuevan obstáculos burocráticos y que llegue la inversión pública en las nuevas tecnologías allí donde sea necesaria. Nos jugamos el futuro.