El Consejo Escolar del Estado quiere suprimir la repetición y que todos los alumnos pasen de curso

La ministra de Educación, Isabel Celaá, siempre ha mantenido que el sistema educativo español es abusivo con las repeticiones. En los países de la OCDE la media de alumnos repetidores es del 11%, mientras que en España uno de cada tres alumnos repite alguna vez a lo largo de su vida académica.

Siguiendo esta filosofía de la ministra Celaá, el Consejo Escolar del Estado llevará mañana a votación un estudio que lleva por título: “Estudio comparado. El éxito en la educación primaria y secundaria” para eliminar la repetición de curso y limitarla sólo a las asignaturas suspensas de manera que todos los alumnos puedan pasar de curso. De ahí que el sindicato CSIF crea que se trate de un “estudio inducido” por Celaá.

El documento, al que ha tenido acceso LA RAZÓN, da algunas “recetas” para disminuir la repetición tomando como referencia las medidas adoptadas por países como Francia e Italia. Así, propone simplificar lo que los alumnos deben aprender. Por que, ahora, tienen “currículos excesivos”. Se debe tender a “aprendizajes imprescindibles” y deben estar en muy estrecha relación con las competencias básicas que debe adquirir un alumno sobre cada una de las áreas o materias.

Por eso los profesores deberían organizar el trabajo en esta línea. “Debería utilizarse la repetición de los aprendizajes no consolidados a lo largo de cada curso como el instrumento esencial para consolidar dichos aprendizajes por parte de todo el alumnado, y no la repetición de curso”, asegura el Consejo Escolar. Por eso cree que es necesario que los profesores se formen para el cambio de metodología.

Esto implicaría que se adaptasen espacios y las aulas orientados a las necesidades de renovación metodológicas en los mismos espacios, lugar de tener que separar a los alumnos que van mal a otro lugar o clase para que refuerce conocimientos.

Así, propone renovar la normativa que regula la repetición y el paso de curso. ¿Con qué criterio entonces un profesor debería proponer que un alumno pasara o no de curso? “Deberían basarse realmente en la evaluación interna y colegiada de las competencias básicas. Para ello, será preciso que todo el equipo docente que atiende a un grupo de alumnos pudiera trabajar y evaluar las competencias colegiadamente y, en consecuencia, también el rendimiento alcanzado. De proceder así, la promoción de curso podría ir acompañada de la orientación que supone para el equipo docente del siguiente curso la descripción de los resultados de evaluación de competencias y del rendimiento académico en cada una de las materias”, expone el documento.

Al pasar al curso siguiente, el nuevo profesor del alumno podría proponer la repetición de aquellos aprendizajes fundamentales de las materias, o parte de materias, no aprobadas por los alumnos en el curso anterior, “siempre que eso sea imprescindible para la continuación de los aprendizajes nuevos. De esta forma se evitaría la repetición de curso completo y que los alumnos y alumnas tengan que volver a cursar materias que ya han superado".

Todas estas medidas irían encaminadas a hacer posible que la repetición sólo fuera “un recurso excepcional, como señalan las leyes educativas y como ocurre en los países señalados”, expone el documento.

El documento ha generado reticencias entre algunos sindicatos. La Central Sindical Independiente y de Funcionarios (CSIF), ha advertido que el Gobierno no se puede amparar en la pandemia para imponer normas educativas sin el debate previo con los sindicatos y resto de la comunidad educativa, como en el caso del decreto para facilitar aprobados y títulos en Bachillerato y la ESO con suspensos.

El pleno del Consejo Escolar del Estado aprobará mañana, previsiblemente, este informe redactado por técnicos del Consejo Escolar a instancias del presidente del Consejo Escolar.

En opinión de CSIF, este informe ha sido “teledirigido” por el Ministerio para avalar sus reformas. CSIF ha recordado que esta medida ya existía en los 90 con la LOGSE y “fue derogada por otro Gobierno socialista, con el ministro Gabilondo por el fracaso que supuso. Consideramos que esta medida es inviable con las actuales ratios de alumnos y la falta de recursos materiales y humanos. En estas condiciones, el personal docente carece de medios adecuados para realizar una atención individualizada del alumno", asegura.

A su juicio, esta medida supondría, además, una continuación al decreto que ya permite a las comunidades otorgar el título de ESO y Bachillerato sin límite de suspensos. Para CSIF, esta norma “vulnera el principio de igualdad de oportunidades, ya que los criterios de evaluación en educación primaria, ESO y Bachillerato podrán ser modificados por las administraciones educativas y centros docentes, por lo que se dará un trato diferente al alumnado en función de la comunidad donde estudie”.