Rivera, desgastado, decidirá el color del partido de La Moncloa

La de Ciudadanos ha sido la campaña del desgaste, según la estimación de los resultados de los sondeos demoscópicos. En la estrategia de los mítines de Rivera han primado dos conceptos: acabar con la «vieja política», y la necesidad de encarar una nueva etapa en la historia de España: una segunda transición. Un mensaje que desde los primeros días caló hasta ascender al partido incluso hasta la segunda posición detrás del PP, según algunas encuestas.

Desde el primer cartel colgado, Rivera ha buscado el contacto con la gente haciendo «paseos» en las principales ciudades y mostrándose cercano para vender esa idea de viento nuevo, esa frase de Víctor Hugo que transmite en todos sus mítines de «No hay nada más poderoso que una idea a la que le llega su tiempo».

Sin embargo, el escenario político ya no es el mismo. A mitad de campaña, unas declaraciones de Marta Rivera de la Cruz, la número tres por Ciudadanos, explicando la reforma de la ley por violencia de género que propone la formación –en la que el agravante por maltrato a una mujer será equitativo al que se produzca contra cualquier miembro de la familia–- provocó una polémica azuzada por toda la clase política que, con toda probabilidad, ha influido en el que, a escasos días después, las encuestas situaran a la formación política en tercera fuerza.

Por otro lado, el cara a cara entre Mariano Rajoy y Pedro Sánchez el pasado lunes ha reforzado la idea de que el sistema político vigente actualmente sigue siendo el bipartidismo, y, además, ha sido determinante para asegurar el voto socialista y popular, o movilizar el que ninguno de los dos partidos tuvieran asegurado.

Por este motivo, el líder de Ciudadanos ha insistido en todos sus discursos alrededor de distintas ciudades en el mensaje del fracaso que supondría para el país continuar en la misma línea política, y así intentar movilizar el voto de los indecisos de cara al 20 de Diciembre. Dentro de este sector hay un porcentaje muy importante de la gente joven y en la última semana el político catalán ha añadido actos con este sector, como un coloquio en la cuidad de Santander en el que hubo preguntas y mucha interacción con los asistentes.

A estas dos rémoras para la campaña de Rivera se le añadió el funeral de Estado por los dos policías asesinados en Kabul (Afganistán), que le obligó a cancelar la agenda programada. Fue el acto central de la campaña en Vistalegre –clásico feudo socialista–, un balón de oxígeno par a la formación naranja al congregar a más de 10.000 personas. No obstante, fuentes del partido no consideran que este desgaste en la campaña de Ciudadanos haya perjudicado al partido, ya que son muy conscientes de que son una formación que actualmente tiene cero escaños en el Congreso y que han conseguido una posición muy «positiva» en muy poco tiempo.

La campaña en 5 frases: el candidato del «no pactaré»

- «C’s no va a pactar con el PP si no es elegido partido para Gobernar. No habrá pacto de Gobierno ni de legislatura»

- «Si quedo segundo yo seré el líder de la oposición»

- «No voy a apoyar a Podemos, Bildu y Compromís con el PSOE y los que además no ganen las elecciones»

- «El cambio sensato que necesitan España y Europa vendrán por el centro y no por los extremos»

- «Hoy más que nunca hay que decir que Cataluña es mi tierra, España mi país y Europa nuestro futuro»