La Audiencia Nacional ha aprobado la extradición de la exenfermera de Hugo Chávez y extesorera nacional de Venezuela, Claudia Patricia Díaz Guillén, por delitos de blanqueo y organización criminal en el supuesto fraude de divisas. En el centro de la trama está el empresario venezolano Raúl Gorrín que acabó al frente de la cadena de noticias Globovisión y que, supuestamente, consiguió cientos de millones de dólares de forma ilícita.

En un auto del 14 de octubre, los magistrados de la sección tercera aprueban que Díaz Guillén sea extraditada a Florida, ya que cumple todos los requisitos necesarios. Recuerdan que la reclamación del Tribunal Federal de Distrito Sur de Florida ve probado que Díaz Guillén y su marido Adrián Velasquez Figueroa, que trabajó como jefe de seguridad de Chávez, participaron en una “estratagema corrupta” en relación al cambio de moneda extranjera efectuado por el gobierno venezolano desde 2008 hasta 2017.

Gorrín pagó presuntamente cientos de millones de dólares en sobornos para efectuar operaciones de cambio de monedas extranjera con tasas favorables, lo que le habría reportado beneficios millonarios. Según la solicitud de extradición, junto con otros, ofrecía y autorizaba pagos corruptos a funcionarios del gobierno venezolano.

La policía detuvo el pasado 23 de diciembre en España a Díaz Guillén y a Velásquez después de que Estados Unidos los reclamara. Ambos ya fueron detenidos en abril de 2018 después de que la Embajada de Venezuela emitiera una orden detención por los delitos de legitimación de capitales, asociación para delinquir y enriquecimiento ilícito contra la también exdirectora de la Oficina Nacional del Tesoro.