Crisis naranja

La baja de Aguado abre otra grieta en Ciudadanos

Bal minimiza la marcha del exvicepresidente en Madrid y Villacís defiende al partido: «Quien no quiera, que se aparte»

Inés Arrimadas saluda al entonces vicepresidente de la Comunidad de Madrid, Ignacio Aguado, en una imagen de hace dos años
Inés Arrimadas saluda al entonces vicepresidente de la Comunidad de Madrid, Ignacio Aguado, en una imagen de hace dos añosEmilio NaranjoAgencia EFE

Ignacio Aguado se hadado de baja en Ciudadanos tras nueve años de militancia y un año y medio sin cargos en el partido, por medio de una carta en la que ayer esgrimió razones como la «falta de liderazgo» y de «estrategia», y la convicción de que la actual dirección ha emprendido una «huida hacia adelante». Su crítica fue demoledora, con acusaciones de «desgaste de la marca» y «fracaso» en un momento delicado para el partido de Inés Arrimadas, a la baja en rendimiento y expectativas electorales, y en cuyas filas se acusará sin duda el golpe de efecto de la maniobra de escape.

El exvicepresidente de la Comunidad de Madrid solicitó hace dos meses la dimisión de toda la Ejecutiva nacional de Ciudadanos y la convocatoria de un Consejo Extraordinario a causa de los «nefastos» resultados electorales en Andalucía, Madrid, Cataluña y Castilla y León. «Sin embargo, ninguna de las dos cosas se ha producido. Más al contrario, la dirección del partido ha decidido emprender una huida hacia delante, que no comparto, disfrazada de una refundación en la que no creo», lamenta Aguado en la carta donde dio a conocer su marcha y en la que reclama un congreso, aunque en el caso de que fuera necesaria esa refundación tendría que ser impulsada, según el exlíder de Cs en Madrid, por una nueva Ejecutiva «y no por la misma que lleva tres años encadenando un fracaso electoral tras otro».

Por su parte, el vicesecretario general de Ciudadanos, Edmundo Bal, restó importancia a la baja como afiliado del ex vicepresidente de la Comunidad de Madrid, recordando que «lleva más de un año fuera de la política».En rueda de prensa desde la sede nacional del partido tras la reunión de la Ejecutiva permanente, el también portavoz adjunto de la formación en el Congreso de los Diputados admitió que «cualquier afiliado que se va es relevante, máxime cuando ha desempeñado cargos de responsabilidad», pero incidió en que, aunque sus opiniones son «respetables», Aguado dejó todos sus cargos hace un año y medio. Por ello, trasladó que ni él mismo ni el resto de la Ejecutiva comparten sus opiniones, aunque sí reconoció que «personalmente» le da «pena» que Aguado, con el que mantiene buena relación, «abandone un proyecto al que él ha aportado tanto».

Bal defendió el proceso de refundación del partido y algunas de las iniciativas que ya se han puesto en marcha, como el proceso de escucha activa al que, según cifras proporcionadas por el propio vicesecretario general, se han inscrito más de 2.000 afiliados y simpatizantes que buscan participar en el proceso. «El G-8 –los cargos de Ciudadanos que están a cargo del proceso– está trabajando en esto, llevando a cabo varios hitos», defendió.

También se pronunció la vicealcaldesa de Madrid y coordinadora de Cs en Madrid, Begoña Villacís, que reafirmó el compromiso con su partido y subrayó que «tiene ganas de trabajar por este proyecto político. Quien no quiera trabajar por ello, pues que se aparte», recalcó.