Política

Tribunal Supremo

Bassa asegura que “no hubo intención de ir a la independencia tras el 1-O”

La ex consejera de Trabajo se desmarca de sus compañeros de ERC y decide contestar las preguntas de la Fiscalía.

Dolors Bassa en la declaración del Supremo
Dolors Bassa en la declaración del Supremolarazon

La ex consejera de Trabajo se desmarca de sus compañeros de ERC y decide contestar las preguntas de la Fiscalía.

A las 16.30 de la tarde se ha reanudado la quinta sesión del juicio del “procès” con el interrogatorio de Dolors Bassa, quien fuera consejera de Trabajo y Asuntos Sociales en el Govern de Puigdemont durante los sucesos de septiembre y octubre de 2017. Bassa, que a diferencia de sus compañeros de ERC sí ha contestado las preguntas de la Fiscalía, ha dejado claro que una vez se recibieron los requerimientos del Tribunal Constitucional, “no se hizo nada, no se materializó ningún acto” para la organización del referéndum. La dirigente independentista, para la que la Fiscalía pide 16 años de cárcel y 16 de inhabilitación por delitos rebelión y malversación, admitió explícitamente “la autoridad del Tribunal Constitucional” pero pensó que “como había un conflicto que se estaba trabajando para resolverlo, pensé que habría que seguir adelante” y, en ningún momento, “consideró que estaba cometiendo un delito”. Bassa justificó la partida presupuestaria reservada para el referéndum en razón a que se esperaba un acuerdo con Madrid para un referéndum pactado y que, por lo tanto, “había que tener algo preparado”.

En cualquier caso la ex consejera aseguró que no existía voluntad de “llegar a la independencia después del referéndum”. “Siempre se tuvo claro que sería algo pactado y la prueba es que estamos aquí y no ha habido independencia”, explicó poco antes de asegurar tajantemente “no sé de qué habla”, cuando vio una factura pro forma en la que Unipost solicitaba, según la Fiscalía, el pago de más de 200.000 euros por gastos generados para la preparación del referéndum. Según Bassa hubo “mil maneras” de detener la consulta del 1-O sin recurrir al “uso de la violencia”. “Podrían haber desnaturalizado el resultado, podrían haberse llevado a las urnas cuando la gente hubiera haber ido a votar. Se me ocurren mil maneras de acabar con el referéndum”, dijo.