Confirmados dos votos falsos en las primarias de Podemos

Los sufragios de los inscritos falsos de LA RAZÓN entraron en el escrutinio.

De todos es conocida la facilidad con la que se puede registrar a inscritos falsos (con DNI inventados y direcciones inexistentes) en el censo de Podemos. A pesar de que el problema tiene muy fácil solución (bastaría con pedir a los inscritos que aporten su DNI escaneado durante el proceso de alta en el censo del partido), Podemos argumenta que incluir este requisito y, por tanto, complicar el proceso de inscripción, limitaría la participación masiva que quiere el partido para que sus procesos electorales internos sean verdaderamente relevantes. De esta manera, la formación de Iglesias sacrifica «calidad democrática» por «cantidad democrática» y transforma la máxima «un hombre, un voto» en «una tarjeta SIM, un voto», ya que tener un teléfono móvil es el único requisito para votar en las primarias del partido. Así, es virtualmente imposible saber a ciencia cierta cuantos de los 368.314 inscritos de Podemos son personas de carne y hueso y cuántos son entes de ficción con DNI falsos.

Podemos responde a los evidentes «agujeros» de su censo asegurando que el sistema informático de las votaciones localiza los intentos de fraude por lo que, aunque no perfecto, se trata de un sistema fiable y a la altura de los principios éticos y democráticos de los que el partido hace gala. Pues bien, al menos dos votos realizados por dos inscritos falsos pasaron desapercibidos y, al no ser detectados, entraron en la urna virtual de Podemos.

LA RAZÓN quiso comprobar de primera mano la fiabilidad de las primarias de Podemos. A tal efecto se procedió a registrar a varios inscritos con nombres falsos y se participó en varias de las votaciones de las primarias, concretamente en Madrid y La Rioja. En total se votó en seis ocasiones. Además de para comprobar si los inscritos falsos podían votar correctamente, se trataba de verificar que cada uno de los inscritos sólo podía votar una vez.

El primero de los inscritos falsos fue «Blas Cardoso» que votó tres veces en las primarias de Podemos en Madrid. «Blas» llevaba inscrito en Podemos desde el 19 de febrero sin ser borrado del censo de la formación liderada por Pablo Iglesias. Tras emitir tres votos (y protagonizar varias informaciones de este diario, que denunció en repetidas ocasiones lo fácil que era registrar a personas imaginarias en Podemos) «Blas» fue finalmente detectado por los responsables informáticos del partido y, según ha podido comprobar LA RAZÓN, sus tres votos fueron eliminados del recuento y no afectaron el resultado de los comicios. Hasta aquí ningún problema: el sistema funcionó. Sin embargo no hay que olvidar que los tres votos de Blas no fueron precisamente secretos sino que fueron publicitados durante las elecciones en un diario de tirada nacional.

No fue este el caso de otros dos inscritos, dados de alta en Podemos también por este diario. Sus votos, según a podido comprobar LA RAZÓN ejecutando el complejo programa informático que Podemos pone a disposición de sus inscritos, sí que entraron en el escrutinio de las primarias en La Rioja. Queda demostrado que contando con un número de móvil y una dirección gratuita de email es posible (en realidad es bastante sencillo) inscribirse bajo nombre y DNI falso y votar en las primarias de Podemos. El número de votos que se pueden emitir sólo está limitado por el número de teléfonos móviles de los que se disponga. Una tarjeta SIM cuesta en cualquier locutorio de España entre 5 y 10 euros. Ese es, por tanto, el precio de un voto en las elecciones internas de Podemos.