Cospedal asiste a su primera reunión de la OTAN con la vista puesta en el sur

Primera reunión de ministros de Defensa de la OTAN en la que participa María Dolores de Cospedal, que llega a Bruselas con una idea clara: el flanco sur como escenario clave.

Primera reunión de ministros de Defensa de la OTAN en la que participa María Dolores de Cospedal, que llega a Bruselas con una idea clara: el flanco sur como escenario clave y prioritario en la política exterior del Gobierno. No es ninguna novedad que el Ejecutivo lleva años reclamando a sus aliados más implicación ante los riesgos que llegan desde África y Oriente Medio, pero cada vez quiere dar más visibilidad a este espacio estratégico e insistir en las amenazas existentes. A finales de enero, el presidente, Mariano Rajoy, participaba en Lisboa en la segunda Cumbre de los países mediterráneos de la UE y poco después, la pasada semana, Cospedal, se reunía en Oporto con sus homólogos francés, italiano y portugués para preparar la reunión de mañana, en la que la titular de Defensa volverá a insistir en el mensaje de que la estabilidad en este área es la estabilidad de Europa. Por este motivo, y siguiendo esta línea, Rajoy se reunirá de nuevo con las autoridades de Francia, Italia y Portugal el 6 de marzo para profundizar en esta «batalla».

De momento, la ministra llega a Bruselas para hacer una firme defensa de la seguridad en el área mediterránea. Y lo podrá hacer con fuerza, ya que el secretario general de la Alianza, Jens Stoltenberg, ha anunciado hoy la intención de crear un centro en el cuartel general de la Alianza en Nápoles para controlar las amenazas desde el norte de Africa y Oriente Medio, principalmente en lo que afecta al terrorismo. Así se lo hará saber Cospedal en la reunión que mantendrán ambos antes de la Cumbre, en la que también se tratará el tema del gasto en Defensa y ese 2% del PIB que exige la OTAN.

Pero la ministra española también viaja a Bruselas con un ofrecimiento bajo el brazo: los 300 militares españoles que se integrarán en uno de los cuatro batallones que la OTAN desplegará en el Báltico ante la amenaza rusa. En concreto, oficializará el despliegue de estos efectivos, que se sumarán al batallón liderado por Canadá en Adazi (Letonia) a partir de mayo. Una aportación que servirá para insistir en que, al igual que España y otros países del sur contribuyen a la seguridad del norte, los aliados deben involucrarse más en el corredor mediterráneo y en el área del Sahel.

Y para que este mensaje no pierda fuerza y se quede sólo en estas reuniones, el Gobierno seguirá ejerciendo presión en este sentido. Tal y como confirmaron a este periódico fuente gubernamentales, el presidente del Ejecutivo y sus homólogos de los países del sur (Francia, Portugal e Italia, aunque no se descarta que se sumen Chipre, Grecia o Malta), analizarán la situación del Mediterráneo, no sólo desde el punto de vista de la inmigración, sino también desde el del tráfico de armas o drogas. Sin olvidar, eso sí, los conflictos y realidades africanos, que en la actualidad implican a miles de militares. Pero los países mediterráneos quieren más implicación. En principio, esta reunión, previa al Consejo Europeo del día 9 de marzo y al extraordinario del 25, sería un encuentro para preparar la tercera Cumbre de países del sur que, como anunció Rajoy, tendría lugar en España en el mes de abril.

Pero además de esta exigencia de España de que los aliados miren al sur, Cospedal también participará estos días en la reunión de la Coalición Internacional contra el Estado Islámico, en la que nuestro país ha incrementado su participación en Irak con 125 militares y 25 guardias civiles más. Y con la participación de efectivos del Centro de Excelencia contra Artefactos Explosivos Improvisados de la OTAN (ubicado en Madrid), que instruirán al Ejército iraquí.