De la Vega pide erradicar la discriminación de la mujer

La primera mujer que preside el Consejo de Estado, María Teresa Fernández de la Vega, tomó ayer posesión de su cargo –con el ex ministro de Justicia Fernando Ledesma y la catedrática Amelia Valcárcel como padrinos– reivindicando en su discurso el protagonismo de la mujer en los puestos de responsabilidad. La igualdad, remarcó la ex ministra, «no es borrar diferencias sino erradicar la discriminación».

En un acto presidido por el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez –para quien la elección de De la Vega ilustra «el cambio en una sociedad decidida a hacer de la igualdad entre hombre y mujer una causa en la que no son admisibles más demoras y en la que no son tolerables más excusas»–, la nueva presidenta del Consejo de Estado hizo hincapié en la necesidad de que se produzca un cambio real en la sociedad que permita terminar con las exclusiones y dificultades que encuentran las mujeres para acceder a puestos de poder. Ante ocho ministros del Ejecutivo y otras autoridades del Estado, De la Vega aseguró que reinvidicar la igualdad supone «subrayar lo valioso de ser diferente y ponderar la singularidad y el pluralismo como fuente de riqueza civil de las naciones democráticas». Por eso, argumentó, la participación plena de mujeres y hombres en los órganos del Estado «no sólo es una cuestión de justicia, que también», sino «de calidad democrática».

De la Vega, que ha mantenido a lo largo de su carrera un discurso feminista y de apoyo a los derechos de la mujeres, ha ejercido como única consejera de la institución durante los últimos ocho años y sustituye en el cargo a José Manuel Romay Beccaría.