La Habana

El Gobierno cierra el viaje del Rey a Cuba sin cita con la disidencia

Exteriores justifica las acusaciones de respaldo al castrismo y argumenta que con la visita solo se trata de corregir una «anomalía».

Don Felipe y Doña Letizia embarcan la semana pasada en el avión del Gobierno que les llevó a Japón para la entronización de Naruhito y, después, a la visita de Estado a Corea del Sur
Don Felipe y Doña Letizia embarcan la semana pasada en el avión del Gobierno que les llevó a Japón para la entronización de Naruhito y, después, a la visita de Estado a Corea del Surlarazon

Exteriores justifica las acusaciones de respaldo al castrismo y argumenta que con la visita solo se trata de corregir una «anomalía».

Exteriores emitió ayer finalmente el comunicado que informaba oficialmente de la visita de Estado que los Reyes realizarán a Cuba la semana inmediatamente posterior a las elecciones del 10-N y lo cierto es que desde el principio el viaje ha estado marcado por la polémica. El departamento dirigido por Josep Borrell desveló que no tendrá lugar un encuentro con la disidencia democrática cubana sino tan solo con la «sociedad civil» sin especificar más el contenido de dicho encuentro. Este punto ha sido especialmente criticado por diversas fuerzas políticas que consideran que el Gobierno –responsable último de la política exterior de la nación por mandato constitucional y responsable inmediato del contenido del viaje de los Reyes– está utilizando esta cita histórica en La Habana para blanquear un régimen dictatorial que no tiene ninguna prisa a la hora de democratizar su ordenamiento jurídico. Sea como fuere, fuentes de Exteriores aseguraron que el viaje pretende corregir una «anomalía» en las relaciones bilaterales entre España y Cuba.

Otro punto que ha estado señalado por la polémica es el hecho de que se produzca precisamente el día después de la celebración de elecciones. A este respecto, el Gobierno ha explicado que la conmemoración de los 500 años de la fundación de la capital cubana es la que ha impuesto la fecha. Pese a todo se ha procurado que la estancia de los Reyes se produzca unos días antes de la conmemoración oficial, que tendrá lugar el día 16 de noviembre, y que aglutinará en La Habana a dirigentes internacionales como Vladimir Putin o el dictador venezolano Nicolás Maduro. El Gobierno explica esta circunstancia aludiendo al hecho de que se quería que la visita tuviera un perfil propio.

La actividad de los Reyes en este primer viaje de Estado que un Monarca español realiza a la que fuera provincia (que no colonia) de España comenzará con una ofrenda floral ante el monumento a José Martí en La Habana, en la plaza de la Revolución. Acto seguido tendrá lugar el encuentro con el presidente Miguel Díaz-Canel en la cercana sede del Consejo de Estado. El espectacular Gran Teatro de La Habana, junto al Capitolio, será el escenario en el que los Reyes inaugurarán una exposición fotográfica de la Agencia Efe sobre la historia gráfica de España y Cuba. El broche a la primera jornada de Don Felipe y Doña Letizia en la capital cubana será una cena de gala en la que no se producirán intervenciones públicas.

Al día siguiente, los Reyes tendrán un encuentro con la colonia española en Cuba, un acto con empresarios con intereses en la isla y un recorrido por las calles de La Habana donde, a diferencia de lo que ocurrió con Don Juan Carlos y José María Aznar, los Reyes podrán recibir muestras de cariño espontáneas por parte del pueblo cubano. Aunque la agenda aún no está completamente cerrada se ha programado también un desplazamiento a Santiago de Cuba para el jueves 14 de noviembre.