El PP critica la «radicalidad» y la falta de «unidad» de los socialistas

El PP cree que el PSOE está en el mismo sitio que antes de la Conferencia Política. Es decir, sin un líder definitivo, sin un proyecto político y «divididos» sobre la idea de España y sobre cuándo afrontar su proyecto de regeneración interna. La secretaria general del PP, María Dolores de Cospedal, criticó ayer la «radicalidad» del PSOE y echó en cara al líder socialista, Alfredo Pérez Rubalcaba, que no responda a la necesidad que tiene España de «moderación, trabajo, unidad y fortaleza». La valoración popular del cónclave socialista se ajustó a los manuales del discurso de partido. Aunque oficiosamente en la dirección popular se feliciten de que la Conferencia Política no haya supuesto un giro en la situación del PSOE. Sostienen que ha servido para que Rubalcaba gane tiempo, y esto, la continuidad de Rubalcaba, es vista en el PP como un elemento que juega a favor. En clave de partido, porque están convencidos de que el problema socialista es de liderazgo, y que en tanto no resuelvan este problema, su discurso seguirá encontrando muchas dificultades para llegar a la ciudadanía. Y ya en clave de Gobierno, porque al margen de las diferencias que les separan del líder socialista, le prefieren a años luz frente a los otros candidatos. El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, mantiene una relación fluida con Rubalcaba. Hay cuestiones de Estado, como Cataluña, sobre las que hablan periódicamente, y cree que es el que mejor puede evitar el «descontrol total» dentro del socialismo. En clave de discurso político, Cospedal apuntó precisamente a la continuidad de Rubalcaba para quitar trascendencia a los resultados de la Conferencia. «No sé si ha salido más o menos fortalecido. Lo que sé es que sigue siendo Rubalcaba», explicó. La número dos del PP incidió en el mensaje del sábado de Rajoy, en el que instaba al PSOE a tener una voz única. En el PP están convencidos de que el futuro de las primarias del PSOE quedará condicionado por las elecciones europeas, una cita en la que ellos pondrán a trabajar a toda marcha su maquinaria desde enero. Ayer la dirección popular oficializó lo obvio, que invitarán a este acto al presidente de honor, José María Aznar. Lo importante no es que se le invite, sino si intervendrá y con qué mensaje. Ayer se le preguntó a Cospedal por las diferencias con Aznar que se visualizaron en las ausencias en la presentación de su segundo volumen de memorias, editado por Planeta. «Aznar fue un gran presidente, y el mejor presidente y el que hoy necesita España es el presidente del Gobierno», dijo.