El PP pide a partidos y entidades romper la mayoría silenciosa

Decidida a dar volumen a la denominada «mayoría silenciosa», la presidenta del PP catalán, Alicia Sánchez-Camacho, dirigió ayer una carta a entidades, partidos políticos catalanes y a entitades sociales, culturales y empresariales, en la que propone un gran acuerdo «por la convivencia» y en defensa de la «cohesión» de los catalanes. Con esta iniciativa, Sánchez-Camacho trata de contrarrestar la ofensiva soberanista y no permanecer de brazos cruzados ante lo que considera un riesgo enorme de que la sociedad catalana acabe fracturada. «No es momento de silencios. Es necesario que todos, partidos políticos y sociedad, nos impliquemos en la resolución del presente para conseguir un futuro mejor. No queremos llegar a arrepentirnos de no haber hecho nada como protagonistas que somos de la sociedad catalana», reflexiona la presidenta del PP catalán.

En su misiva, Sánchez Camacho intenta poner en valor el avance del Estado de las Autonomías y los progresos que ha permitido. «Disfrutamos del mayor autogobierno que ha tenido nunca Cataluña, tenemos que estar orgullosos», subraya. Dicho esto, admite que «todo es mejorable», pero llama a realizar los progresos necesarios «sin romper nada». «Queremos salvaguardar la cohesión social y lo tenemos que hacer entre todos», pide la dirigente popular.

El objetivo de Sánchez-Camacho es que su iniciativa sirva para fijar encuentros con agentes económicos y sociales de Cataluña y poner en marcha una respuesta cívica al debate independentista, que describe como «la única ocupación y preocupación del Govern de Cataluña, que dedica no sólo tiempo sino también recursos públicos». «No sólo nos estamos jugando el futuro de nuestro país sino el de nuestra sociedad como la conocemos. Por eso es muy importante la implicación de todo el mundo, no sólo de los que piensan en una Cataluña separada de España», advierte Sánchez-Camacho.

La presidenta del PP catalán ha hallado una respuesta positiva de Ciutadans, pero no del PSC, que no está dispuesto a mezclarse con los populares y que sigue empeñado en dar cuerda al derecho a decidir siempre y cuando se halle el consenso con los poderes estatales. Tampoco el PSOE ni Unió Democràtica están dispuestos a participar en el frente no nacionalista que abandera Sánchez-Camacho. Los primeros, porque defienden una reforma federal de España, y los segundos, porque son nacionalistas. Nada de ellos disuadirá al PP de seguir adelante con su idea.