El Rey: «Estoy muy bien. Ya veis»

Don Juan Carlos recibe el alta hospitalaria y regresa a Zarzuela, donde seguirá con el programa de rehabilitación hasta ser operado de nuevo en noviembre

El Jefe de Estado pasó ayer la primera noche en el Palacio de la Zarzuela después de una semana hospitalizado en el centro Quirón de Madrid. A las 12:00 horas, la directora del hospital, Lucía Alonso, leyó el parte médico que corroboró la primicia que Doña Sofía dio el lunes: «El Rey recibe al alta hospitalaria». Según el informe médico, el Jefe de Estado ha cumplido «de forma muy satisfactoria el postoperatorio» y ha conseguido «autonomía suficiente para los movimientos cotidianos».

A las 12:10, el Monarca abandonó el hospital. Antes de marcharse, bajó la ventanilla del coche para atender a los periodistas que le preguntaron por su estado. «Muy bien, muy bien, ya veis», respondió Don Juan Carlos. «Estupendamente. Gracias».

El Rey fue intervenido quirúrgicamente el pasado martes de la cadera izquierda a causa de una infección, y al día siguiente inició un proceso de rehabilitación que ha continuado durante toda la semana. A pesar de que el parte refleje que ya ha adquirido la suficiente autonomía para los movimientos cotidianos, el Jefe de Estado supeditará su agenda oficial a su recuperación, hasta ser operado nuevamente. Sí mantendrá audiencias con los representantes de las instituciones, así como los «despachos» semanales con el presidente del Gobierno y los diarios con el jefe de la Casa, Rafael Spottorno, pero el objetivo de Zarzuela es que el Rey no haga esfuerzos físicos que puedan entorpecer su recuperación.

El cirujano a cargo de la operación, Miguel Cabanela, le colocó al Rey una prótesis temporal recubierta de antibiótico para atacar la infección, y en noviembre intervendrá nuevamente a Don Juan Carlos para instalarle la definitiva. Tal y como informa el parte médico, en este intervalo de tiempo Don Juan Carlos «continuará con el tratamiento, las revisiones posoperatorias y el programa de recuperación previsto, en régimen ambulatorio». Según explicó el doctor Miguel Cabanela, el programa de rehabilitación será poco agresivo, y se basará en ejercicios de brazos y paseos por la piscina. También recibirá antibiótico intravenoso durante seis semanas y descansará otras dos.

El cirujano, que operó al Monarca junto a su «colega» Robert Trousdale, regresó ayer a Rochester, EE UU, para reincorporarse a su trabajo en la clínica Mayo. El cirujano ha permanecido toda esta semana en Madrid, pendiente de la evolución del Rey, y volverá a la capital los días previos a la siguiente operación para encargarse nuevamente de intervenirle.

En estos momentos el Rey necesita un andador para poder desplazarse. Según pronosticó Cabanela, podrá caminar con normalidad seis semanas después de la próxima operación. Fuentes de la Institución explican que no se forzará la reanudación de la agenda pública del Rey, ya que insisten en que lo prioritario es que se recupere completamente para que pueda cumplir en un futuro sus funciones sin restricción. El Jefe de Estado no podrá asistir a la próxima Cumbre Iberoamericana en Panamá ni presidir la Fiesta Nacional del 12 de octubre y, según los plazos de la recuperación y próxima operación, podría darse el caso de que no presida el 35º aniversario de la Constitución el 6 de diciembre, y quizá tampoco el Día de las Fuerzas Armadas, un mes después. En estos actos será Don Felipe quien le represente. No podrá hacerlo en la Cumbre Iberoamericana, ya que es un encuentro entre jefes de Estado, por lo que será el jefe del Ejecutivo, Mariano Rajoy, quien lidere la delegación.

Según informaron fuentes de la Casa antes de que se conociera que Don Juan Carlos sería intervenido quirúrgicamente por quinta vez en año y medio, la agenda del Monarca –a diferencia del pasado año en que estuvo marcada por la proyección de la Marca España en el exterior, y de éste en el que Don Juan Carlos se centró en devolver la confianza de los ciudadanos a las instituciones dado el gran desapego general–, estará marcada por el contexto social y político del país. Es decir, el Monarca podrá volver a viajar si su recuperación continúa en esta línea evolutiva.