Lucha contra ETA

Etarras huidos a Venezuela piden a Maduro que no colabore con el Ejecutivo español

El autodenominado "Colectivo de Refugiados Vascos en Venezuela"ha reclamado al Gobierno de Nicolás Maduro que "no se involucre"en la "estrategia macabra de represión"que quiere mantener el Ejecutivo español.

El autodenominado "Colectivo de Refugiados Vascos en Venezuela"ha reclamado al Gobierno de Nicolás Maduro que "no se involucre"en la "estrategia macabra de dolor, represión y sufrimiento que quiere mantener el Gobierno español contra el pueblo vasco".

Según informa el diario digital "Naiz", de la izquierda abertzale, este colectivo ha emitido un comunicado en el que critica la detención del presunto miembro de ETA Asier Guridi Zaloña, alias "Gari", sobre el que pesa una orden de ingreso en prisión en España.

En el comunicado, los refugiados vascos también han señalado que, a pesar de que en los medios de comunicación se ha presentado el arresto como una "gran operación policial", Guridi residía en Venezuela desde hace más de una década y fue detenido cuando llevaba a su hijo venezolano al colegio y a su esposa al trabajo.

Por ello, han opinado que "lejos de cualquier parecido a una 'gran operación policial, la detención de nuestro compañero Asier Guridi, no es más que el reflejo de la miseria política y humana del Estado español, que solo busca alargar el sufrimiento y dolor".

Sobre Guridi pesan varias reclamaciones judiciales que tenía en vigor en España y en Francia, entre ellas una orden de búsqueda, detención e ingreso en prisión dictada en septiembre de 2001 por la Sala Penal Sección Tercera de la Audiencia Nacional.

El miembro de ETA tenía, además, dos órdenes de búsqueda, detención y personación dictada en 2004 por el Juzgado Central de Instrucción número 1 de la Audiencia Nacional por un delito de terrorismo, y una segunda en enero de 2013 por el Juzgado Central de Instrucción número 1 de la Audiencia Nacional.

Guridi comenzó su actividad en el comando Txantxi, donde entre los años 1987 y 1992 participó en acciones perpetradas en su mayoría en la localidad guipuzcoana de Oñate, tales como incendios de vehículos y sucursales bancarias.

Fue arrestado en diciembre de 1992 e ingresado en prisión hasta 1997 pero su nombre volvió a salir a la luz cuando en enero de 2003, tras la detención en la localidad francesa de Estialescq de dos miembros del aparato logístico-LOHI de la organización terrorista ETA, fueron incautadas varias fotografías del detenido para la confección de documentaciones falsas.

Cuatro años más tarde, el Tribunal de Grande Instance de París le condenó a dos años de prisión por su integración en LOHI, junto al histórico dirigente de ETA Francisco Javier López Peña, alias Thierry, y en noviembre de 2009 el Tribunal de Apelación de París dictó una orden europea de detención por asociación de malhechores para la preparación de un acto terrorista, que se unía a las reclamaciones de los tribunales españoles.