Felipe VI recupera su agenda internacional en medio del «pròces»

La agenda del Rey ha estado marcada desde el inicio del curso político por el desafío secesionista catalán, hasta el punto de que Don Felipe ha tenido que cancelar compromisos oficiales y la Reina ha presidido actos en su lugar, como el lunes pasado en la entrega de los premios Jaime I.

La agenda del Rey ha estado marcada desde el inicio del curso político por el desafío secesionista catalán, hasta el punto de que Don Felipe ha tenido que cancelar sus compromisos oficiales en algunas ocasiones y presidir los actos en su lugar la Reina, como sucediera el lunes pasado en Valencia por la entrega de los premios Jaime I, teniendo después toda la semana despejada. Pero las pretensiones independentistas en Cataluña no frenan la agenda exterior, y esta mañana los Reyes han recibido en el Palacio Real al presidente de Israel, Reuvén Rivlin, y a su mujer, Nechama Rivlin. La primera dama israelí sufre problemas respiratorios, por lo que Doña Letizia ha estado especialmente volcada en ella, ofreciéndole el brazo para ayudarla en sus desplazamientos y dándole conversación.

La visita de Estado del presidente argentino, Mauricio Macri, a nuestro país en febrero del año pasado inauguró el nuevo protocolo instaurado por Felipe VI para recibir a los Jefes de Estado: antaño se hacía en el Pardo y el Monarca cambió de escenario al Palacio de Oriente para dotarlo de mayor solemnidad.

Desde un Rolls Royce negro se ha bajado el matrimonio israelí, escoltado por la Guardia Real , y se ha entonado el himno de ambas naciones con los 21 cañonazos de rigor. Después, el Rey, acompañado por su invitado, ha pasado revista, tras lo que, acompañados por sus mujeres, han saludado a ambas delegaciones. Por parte de la española figuraban, entre otros, la presidenta del Congreso, Ana Pastor , el ministro de Exteriores, Alfonso Dastis, y la alcaldesa de Madrid, Manuela Carmena. Como novedad, este año la Casa del Rey ha introducido la novedad de invitar como público a personas de la comunidad judía, para hacer más partícipe al entorno del país que nos visite. El desfile también ha contado con novedades y es que se ha aumentado la presencia de efectivos de la Guardia Real: 530, formados por grupos de honores de tres compañías distintas.

El Rey y el presidente israelí mantendrán una reunión en La Zarzuela, tras la que se ofrecerá un almuerzo. Este viaje tiene como objetivo reforzar las tres décadas de relaciones diplomáticas entre los dos países, cumplidas en 2016, así como celebrar "los cien años transcurridos desde el restablecimiento de la comunidad judía en España tras la expulsión de 1492", según informó la oficina presidencial en un comunicado.

Para terminar el día, los Reyes ofrecerán una cena de gala en el Palacio Real, en la que Don Felipe pronunciará un discurso, el primero después de los premios Princesa de Asturias, donde aseguró que “España resolverá el inaceptable intento de secesión por medio de la Constitución”.