Históricos de ETA y autores de asesinatos, entre los que serán excarcelados

Históricos de ETA como Domingo Troitiño e Isidro María Garalde y autores de varios asesinatos figuran entre los nueve presos de la banda terrorista para los que la Audiencia Nacional ha decidido hoy su excarcelación en aplicación de la sentencia del Tribunal de Estrasburgo sobre la doctrina Parot.

Además de Troitiño, condenado por el atentado de Hipercor de Barcelona, en el que murieron 21 personas, el otro histórico etarra que figura en la relación es Isidro María Garalde, alias Mamarru, al que se consideró responsable de las finanzas y el aparato económico de ETA, así como del sector de fotografía del aparato logístico.

Isidro María Garalde era amigo personal de otro histórico dirigente de ETA, Domingo Iturbe Abásolo, alias Txomin, que murió en Argel a consecuencia de un accidente de automóvil en 1987.

En la relación figura también Jokin Mirena Sancho, que fue condenado a más de 156 años de cárcel por varios atentados, entre ellos el asesinato en 1983 de Jesús Blanco Cereceda, jefe de comunicaciones del aeropuerto de Noain en Pamplona, y el del policía nacional Diego Torrente Reverte en 1984.

Además, José Ignacio Urdiain, condenado a 250 años de prisión por su participación en cinco asesinatos, entre otros delitos terroristas, y Jon Koldo Aguinagalde, que formó parte del comando Aizkora de ETA junto con los hermanos Domingo y Antonio Troitiño, grupo al que se le atribuyeron los asesinatos de un carnicero en Irún en 1983 y de un guardia Civil al año siguiente.

Otros etarras que serán excarcelados son Joseba Koldobika Artola, condenado a 38 años de prisión por el atentado con resultado de muerte de un policía, entre otros delitos terroristas, y Elías Fernández Castañares, a 27 años por la colocación de una bomba en Vizcaya que hirió a un agente de los TEDAX.

Además, Juan Francisco Gómez López, considerado colaborador del comando Vizcaya, grupo que asesinó de un tiro en la nuca al subteniente de la Guardia Civil Cristóbal Martín Luengo el 8 de septiembre de 1987 y ocho días más tarde a José Luis Barrios Copetillo, también de un disparo en la cabeza.

Por último, Luis María Azcargorta, condenado por el atentado con una bomba-lapa cometido por el comando Araba en 1985 en Vitoria en un vehículo de un policía nacional, que falleció.