ISIS dio las órdenes a los terroristas de Barcelona a través de la Deep Web

El Cibercalifato ha diseñado una aplicación para videoconferencias por canales secretos.

No consultaban las redes sociales «clásicas» con fines yihadistas, algo extraño en una célula que tenía planificados atentados que, de haberse podido consumar en su totalidad, hubieran cobrado centenares de víctimas.

El motivo, según fuentes que investigan lo ocurrido en Cataluña, es que los terroristas, al menos algunos de ellos, interactuaban con los que les dirigían desde Siria a través de canales secretos de una aplicación que el Cibercalifato (la rama informática) del Estado Islámico ha conseguido poner en marcha a través de la «Deep Web», (el internet profundo).

Esta aplicación permite, entre otras cosas, la videollamadas en las que se pueden dar «lecciones» de todo tipo, logísticas, operativas, sobre explosivos, armamento, etcétera.

La presencia del yihadismo en la Deep Web es conocida ya que no sólo es utilizado por el Estado Islámico sino también por Al Qaeda.

Formación

La novedad, en cuanto a funcionamiento de células se refiere, es que se utilicen en el periodo de formación, aunque, como ya adelantó este periódico, las últimas instrucciones las reciban los terroristas personalmente.

Los que atentaron en Cataluña viajaron a París, donde también les entregaron piezas para bombas que no podían adquirir en el mercado abierto.

Con éste y otros datos, los expertos han llegado a la conclusión de que el Estado Islámico, el Daesh, ha diseñado, para las campañas terroristas que va a desarrollar en Occidente, con el fin de paliar las derrotas que sufre en Siria, un nuevo modelo de célula que ha ensayado (no con demasiado éxito por la explosión de Alcanar) por primera vez en Cataluña.

Las principales características de este tipo de grupo criminal es que están «dirigidas (a través de la citada aplicación que permite interactuar al “soldado” con su jefe en Siria) y no sólo inspiradas» desde allí, lo que conlleva que parte de sus miembros son formados directamente por militantes especialistas del Estado Islámico.

La célula que cometió los atentados de París de noviembre de 2015, contra diversos objetivos, entre ellos la discoteca «Bataclán», era un primer ensayo de esta estrategia que, con el paso del tiempo, los yihadistas han perfeccionado.

El Daesh da una gran importancia a esta línea de actuación. En París, los atentados fueron simultaneados con un intento de ataque por parte del Cibercalifato a las redes informáticas de las Fuerzas de Seguridad galas, con el fin de restarles operatividad, tal y como adelantó este periódico en su página web.

La otra característica del nuevo modelo es la de la multifuncionalidad de sus miembros; es decir, los terroristas no tienen misiones concretas asignadas sino que todos deben que hacer todo, según las circunstancias: confeccionar artefactos explosivos; comprobar la información para un atentado; adquirir los materiales necesarios; alquilar vehículos; buscar casas susceptibles de ser «okupadas» o alquiladas durante algún tiempo, etcétera.

Por la edad que tenía, 45 años, el autoproclamado «imán» de Ripoll, Abdelbaky es Satty, podía ejercer un papel predominante sobre los demás, pero era un mero transmisor, y no el único, de las órdenes que llegaban de Siria.

Viajes

El descubrimiento, como adelantó LA RAZÓN, de que hasta cinco miembros del grupo de habían desplazado a Francia en fechas inmediatamente anteriores a los atentados, podría indicar que ese papel de intermediario lo podía ejercer simultáneamente algún otro integrante del grupo.

Los expertos llaman la atención sobre el modelo de nueva célula y que esté «dirigida» desde Siria y no sólo «inspirada».

En el caso de los atentados de París, a los que siguieron los de Bélgica, fue uno de los responsables del Daesh para acciones criminales en Europa, Abdelmahid Abaaoud, el que se trasladó a la capital francesa para dirigir los ataques. Fue abatido por las Fuerzas de Seguridad galas días después de los citados atentados.

Varias células

Con el modelo utilizado por primera vez en Cataluña, el Daesh, a través del Cibercalifato, puede adiestrar y dirigir varias células de forma simultánea.

En estos momentos, dada la pésima situación bélica por la que atraviesa la banda yihadista, resulta impensable que los aspirantes a terroristas se trasladen a Irak o Siria. Hace algunos meses se detectaron algunos casos, pero esta estrategia ha sido abandonada por su peligrosidad (los «alumnos» tenían que travesar territorio enemigo) y la vigilancia en las fronteras se ha reforzado de una manera considerable.

Satty comunicó en abril a los responsables de la mezquita de Ripoll que necesitaba tres meses de «excedencia» para viajar a Marruecos con el fin de realizar un cursillo de adoctrinamiento religioso. No sólo le denegaron el permiso sino que le echaron. Para los investigadores está claro que quería disponer de todo el tiempo posible para terminar de adoctrinar a los integrantes de la célula a los que daba acceso a los canales privados del Cibercalifato.