Terrorismo radical

La Audiencia reprocha a EE UU que no le ayude en una investigación yihadista

De la Mata pidió hace 11 meses datos de correos y perfiles en Facebook de seis detenidos en Ceuta

Agentes de la Policía Nacional conducen a uno de los detenidos en la «operación Chacal» para su traslado a Madrid desde Ceuta el 24 de enero de 2015
Agentes de la Policía Nacional conducen a uno de los detenidos en la «operación Chacal» para su traslado a Madrid desde Ceuta el 24 de enero de 2015larazon

De la Mata pidió hace 11 meses datos de correos y perfiles en Facebook de seis detenidos en Ceuta

El juez de la Audiencia Nacional José de la Mata cerró ayer la investigación abierta en enero de 2015 a seis supuestos yihadistas –detenidos en la barriada ceutí del Príncipe en la «operación Chacal»– con un desahogo. Tras casi once meses esperando infructuosamente a que Estados Unidos responda a la solicitud de auxilio judicial cursada en mayo del pasado año, el magistrado ha cerrado el sumario con el procesamiento de los investigados por integración en organización terrorista y tenencia ilícita de armas y, sobre todo, con un nada velado reproche a las autoridades estadounidenses por su falta de colaboración. Y es que De la Mata no ha sido capaz de conseguir analizar el contenido de los correos y los perfiles de Facebook de los imputados, que pidió a Washington que reclamara a Microsoft y a los responsables de la red social. De la Mata consideraba esencial esa información para «completar la investigación», así como para «averiguar la posible existencia de otras personas involucradas».

Y no será por falta de intentos. El instructor envió a Estados Unidos «un extenso informe adicional justificando la peligrosidad de los procesados» (Interior aseguró que los detenidos estaban «dispuestos a inmolarse») y la necesidad de llevar a cabo la diligencia dada su «relevancia», haciendo hincapié en «el peligro» derivado de los hechos investigados.

Durante meses, recuerda el juez, se mantuvieron «continuas conversaciones y reuniones» con las autoridades norteamericanas, a las que se entregó información adicional, insistiéndoles en la «urgencia» de la medida. Ni por esas. Todos esos esfuerzos resultaron baldíos pues, como constata De la Mata en su auto de conclusión del sumario, «ha sido imposible conseguir de Estados Unidos la cooperación internacional requerida». Al magistrado no le duelen prendas en reconocer que en estos últimos meses se han llevado a cabo «todas las diligencias que se han estimado esenciales» para la investigación, «con la única excepción» de esa comisión rogatoria.

«No hay expectativas razonables de que la petición de cooperación judicial internacional vaya a ser atendida en el futuro» –se resigna el juez– quien atendiendo a la situación de prisión provisional de los detenidos –los hermanos Farid, Mohamed y Yunes Mohamed Al Lal, Abdel Abdel Lah Ahmed y los también hermanos Anuar y Reduan Ali Amzal– ha optado finalmente por no esperar más y acordar su procesamiento.

En los domicilios de los detenidos en la «operación Chacal» los agentes hallaron, entre otros objetos, una pistola, machetes de grandes dimensiones, uniformes de combate, pasamontañas y placas de matrícula.

Tras tomar declaración a cuatro de los primeros detenidos, el juez Pablo Ruz (antecesor en el Juzgado de Instrucción número 5 de De la Mata) envió a prisión a Farid y Mohamed Mohamed Al Lal y a Anuar Ali Amzal y dejó en libertad al hermano de este último, Reduan, tras constatar los forenses de la Audiencia Nacional que padecía una notable discapacidad psíquica.

paralelismo con «Charlie hebdo»

El Ministerio del Interior señaló tras las detenciones de los supuestos yihadistas de la barriada del Príncipe Alfonso de Ceuta «el gran paralelismo» existente entre los arrestados y los autores del atentado, tres semanas antes, contra la redacción de la revista «Charlie Hebdo» en París y destacó «la fuerte determinación de cometer atentados» de los detenidos, que actuarían siguiendo las directrices del líder de Estado Islámico, Abu Bker Al Baghdadi. De hecho, la «operación Chacal» fue el primer golpe antiyihadista en España tras el atentado contra la revista satírica francesa. Sin embargo, en su resolución el magistrado contempla una calificación alternativa a la de integración en organización terrorista que rebajaría las imputaciones a delitos de enaltecimiento (en su modalidad de «captación, adoctrinamiento, adiestramiento o formación» dirigida a incorporar a nuevos yihadistas) o de colaboración con organización terrorista.