La vía judicial, en manos de la Fiscalía y las familias

La Audiencia Nacional no ha abierto todavía diligencias para investigar la desaparición de los tres periodistas españoles en Siria. Fuentes jurídicas confirmaron que el juez de guardia, Fernando Andreu, titular del Juzgado de Instrucción número 4 de este tribunal, no puede dar ese paso sin que la Fiscalía o los afectados, en este caso a través de sus familiares, presenten una denuncia en la Audiencia Nacional si finalmente se confirmase que los tres periodistas han sido secuestrados por una de las organizaciones terroristas implantadas en Siria.

Y es que la reforma del ejercicio de la justicia universal que entró en vigor en marzo del pasado año establece que los jueces españoles «solamente» podrán perseguir los actos de terrorismo cometidos en el extranjero contra ciudadanos de nacionalidad española «previa interposición de querella por el agraviado o por el Ministerio Fiscal». Algo que, por el momento y a la espera de cómo se desarrollen los acontecimientos, no se ha producido.

Con anterioridad a la entrada en vigor de la reforma, recuerdan fuentes de la Audiencia Nacional, en casos similares bastaba con que las Fuerzas de Seguridad pusiesen el hecho en conocimiento del magistrado de guardia para que inmediatamente se abriesen diligencias. Así sucedió, por ejemplo, en octubre de 2013 tras el secuestro del periodista español Marc Marginedas, de «El Periódico» –retenido durante casi seis meses en Siria por el Estado Islámico de Irak y Levante (ISIL)–, que investigó el juez Santiago Pedraz.