España

Margallo defiende ante Reino Unido los controles en la verja de Gibraltar

Las retenciones en la frontera de Gibraltar eran ayer las habituales
Las retenciones en la frontera de Gibraltar eran ayer las habitualeslarazon

El ministro de Asuntos Exteriores y Cooperación, José Manuel García-Margallo, trasladó ayer a su homólogo británico, William Hague, que España tiene la «obligación» de hacer controles en la verja que delimita Gibraltar –como los realizados el pasado fin de semana– para velar por el cumplimiento de las normativas europea y española y ha asegurado que se harán siempre que se considere «necesario».

Según informaron fuentes diplomáticas, Margallo respondió así al jefe de la diplomacia británica, que el domingo le transmitió en una llamada telefónica la protesta de su Gobierno por los retrasos registrados este fin de semana para cruzar la frontera gibraltareña. El propio Hague informó en su cuenta oficial de Twitter de esta conversación para expresar su «preocupación por las restricciones en la frontera hispano-gibraltareña».

García-Margallo confirmó que se habían establecido controles más exhaustivos durante los últimos días, que responden a la «obligación» que tiene España de que se respete la ley. En concreto, recordó que España debe velar por el cumplimiento de la normativa sobre circulación de personas; de la normativa fiscal, para evitar la evasión de capitales, y para luchar contra los tráficos ilícitos y el contrabando. Por ello, el ministro de Asuntos Exteriores español explicó que este tipo de registros más exhaustivos, como los de los últimos días, se seguirán haciendo cuando se considere «necesario».

Dicho esto, García-Margallo insistió en que España está «por el diálogo y por el respeto a la legislación nacional y de la Unión Europea y no por la vía de utilizar hechos consumados». Las autoridades del Peñón denunciaron que las autoridades españolas estaban provocando «retenciones deliberadas» en el tráfico desde y hacia la colonia británica desde el pasado viernes, debido a que agentes de la Guardia Civil registraban «prácticamente todos los vehículos».

En la conversación con Hague, García-Margallo recalcó que España tiene también la obligación de «cumplir las normas de la Unión Europea sobre protección medioambiental» y aprovechó para trasladar a su interlocutor que España debe velar «por los intereses de los pescadores españoles que faenan en aguas españolas».

La protesta de este fin de semana se produce después de los incidentes que se registraron la semana pasada en aguas del Estrecho, cuando pescadores españoles denunciaron que barcos gibraltareños estaban tirando al fondo marino bloques de hormigón. Las autoridades del Peñón aseguraron que están construyendo arrecifes artificiales, mientras que los marineros gaditanos denuncian que ahuyentan la pesca de sus caladeros. Según indicaron fuentes diplomáticas, España está estudiando tomar medidas y denunciar ante la Unión Europea los posibles daños medioambientales que podrían estar provocando estas prácticas por parte de las autoridades gibraltareñas que, además, van contra las actividades pesqueras tradicionales de la pesca española. Pese a esto, ni España ni Reino Unido han querido relacionar estos hechos con los del fin de semana en la verja.